Si no te gustan del todo (o absolutamente nada) los amigos de tu pareja… ¡Houston, tenemos un problema! Veamos cómo se puede solucionar según nuestra psicóloga y sexóloga experta.
Mira, la verdad es que “no me gustan los amigos de mi pareja. ¡Hala, ya lo he dicho!”. Seguro que has tenido esta conversación con alguno de tus amigos (los que sí te caen bien) y habéis barajado durante horas las posibilidades que tienes de salir “ileso” de la situación. ¿Tengo que dejarlo con mi pareja porque no soporto a sus amistades? ¿Debería hacer algo para intentar que me caigan mejor? ¿Quizás nos vendría bien distanciarnos un poco? ¿O puedo simplemente no volver a quedar con ellos? Seamos sinceros, en un contexto tan peliagudo, necesitamos profundizar en el asunto con la ayuda de un experto.
Por qué no me gustan los amigos de mi pareja
Nos reunimos con Irene Martín Torruella, psicóloga y sexóloga, para ahondar un poco más en las causas y también en las consecuencias de este problema que al parecer es más habitual de lo que pensamos. Y es que es completamente normal haber experimentado este sentimiento alguna vez. Pero el tema está en ir un poco más allá y preguntarse realmente el porqué del asunto. ¡Y en esto nuestra experta tiene la respuesta!
“Algunas veces puede tener que ver con incompatibilidad de personalidades, gustos o valores. Por ejemplo, si los amigos de mi pareja solo hablan de deporte y a mí no me gusta este tema, es complicado que vaya a sentirme a gusto con ellos”. Algo que, seguramente, nos ha pasado a todos en algún momento de nuestra vida, mientras esperamos pacientemente a que la conversación tome un giro y podamos empezar a aportar algo más que una simple sonrisa incómoda. Pero aún así, esto no debería ser la razón principal por la que alguien no nos caiga bien, ¿no?
Martín especifica que realmente las incompatibilidades más complicadas de gestionar tienen que ver más con una cuestión de valores e ideología. “Por lo general nos cuesta tener vínculos con personas que tienen ideologías totalmente contrarias a las nuestras. De hecho, para mucha gente, esto es un valor en sí mismo. Es decir, no quieren tener en su vida a alguien que no respete sus creencias o sus derechos”. ¡Algo totalmente lógico y comprensible!
Pero, y además de estas diferencias, ¿podría haber motivos tóxicos detrás? “Algunas veces puede tener que ver con celos, ya sea por parte de la pareja o de las amistades”. Quizás sientes que tu pareja dedica más tiempo a sus amigos que a ti, que “no te hace caso” cuando estáis en grupo y lo mismo pueden pensar sus amistades de vuestra relación. Sin duda es un tema que habría que trabajar porque no estaríamos partiendo de una perspectiva de pareja sana. Y esto es lo último que necesitas, sobre todo si quieres que sea una relación duradera.
“Mi pareja cambia cuando está con sus amigos y por eso no me caen bien”
Seguro que te ha pasado que quedáis con sus amigos y es una persona completamente distinta. No terminas de reconocer a tu pareja en ese entorno y piensas que está actuando o adoptando un rol determinado. Es uno que no te gusta nada y, por tanto, hace que empieces a “cogerle manía” a sus amigos.
Aquí es mejor intentar ser empático y pensar que igual que no actuamos de la misma manera en el trabajo que con los amigos, con la pareja ocurre lo mismo. Nuestra psicóloga explica que tiene que ver con “una cuestión de aprendizaje y de distinguir cómo actuar según nuestro contexto. Todo el rato estamos aprendiendo a comportarnos según las respuestas que recibimos de nuestro entorno. Y quizás con nuestros amigos se refuerza que actuemos de determinada manera que a nuestra pareja no le gusta”. Como la clásica situación en la que tu pareja y sus amigos se ríen de bromas absurdas, esas inside jokes que, a ti, además de no hacerte ninguna gracia, te hacen sentir totalmente fuera del círculo.
Al final, “la cosa se complica cuando no se corresponde la idea que tienes de tu pareja y cómo se muestra ante los demás”. Es habitual cuando todavía estamos en esa primera fase de conocer a la otra persona. “Tendemos a esconder las partes que pensamos que son “peores” de nosotros, las que nos dan más vergüenza y nos gustan menos. Por eso, a veces, cuando conocemos el círculo de nuestra pareja y entramos en contacto con nuevas versiones de ella, podemos llevarnos una sorpresa desagradable”, explica Martín.
Pero entonces, ¿qué podemos hacer si nos desagrada cómo es nuestra pareja en otros círculos y eso mismo hace que también nos disguste su entorno social? “Es importante saber que no todo nos va a gustar de nuestra pareja y que si queremos seguir con ella, hay cosas en las que tendremos que ceder. En qué cosas ceder y en cuáles no es una decisión que recae exclusivamente en la persona”, resume la experta con este tip que da para reflexionar.
¿Se puede arreglar una mala relación con sus amigos?
No te gustan los amigos de tu pareja y encima no sabes cómo lidiar con la situación. Vamos, ¡un dramón tras otro! ¿Hay acaso algo que se pueda hacer para fomentar una relación que aparentemente no es buena? “La gente tiende a pensar que cuanto más tiempo pases con alguien, mejor te llevarás, pero esto es un error. No sólo importa la cantidad de tiempo que paséis juntos, sino también lo que hagáis con ese tiempo”, desmitifica Martín.
Nuestra psicóloga explica que lo ideal es que haya interacciones o vivencias que sean consideradas agradables para todos. Por ejemplo, hablar de cosas que tengáis en común, hacer planes que gusten a ambas partes, evitar temas conflictivos que sabes que pueden causar bronca. Vamos, conseguir disfrutar con esas personas y que ellas disfruten contigo. Algo que parece sencillo dicho así, pero en lo que habría que poner mucho empeño (por ambas partes) para conseguir resultados.
¿Y si las incompatibilidades se mantienen y es algo insostenible? ¿Habría que plantearse dejar a esa persona? Aquí la experta tiene una postura clara: “La psicología clínica estudia la conducta del ser humano de manera individual porque cada caso es único y hay que tener en cuenta sus particularidades concretas. Por eso, a veces los consejos de psicología que vemos en redes sociales no nos sirven. Podríamos hablar de generalidades, pero hasta eso hay que cogerlo con pinzas”.
Actitudes que debes evitar si no te gustan los amigos de tu pareja
Hay consejos y consejos. Y muchas veces los que te pueden dar tus amigos o familiares, desde el desconocimiento de la situación o incluso desde la falta de inteligencia emocional, no siempre son los mejores que puedes luego llevar a cabo. Seguro que has visto alguna vez en las películas eso de “elige: ellos o yo”. Pues bueno, ya te puedes imaginar que es mejor que este tipo de ultimatums se queden tras la pantalla.
“Desde luego, siempre hay que respetar los límites acordados en la relación y no vulnerar los derechos de la otra persona. Hay ciertas actitudes que no se pueden permitir, ni en relaciones de pareja ni de cualquier otro tipo”. La experta enumera cuestiones como manipular a la otra persona para que deje de ver a sus amistades, menospreciar o incluso ridiculizar a la pareja por no llevarse bien con su círculo. Aconseja en estos casos ser asertivos a la hora de tratar estos temas. “Es recomendable comunicarnos de manera sincera y firme, sin atacar a la otra persona pero haciendo valer nuestros derechos”.
¿Quién debería tomar las riendas del asunto?
Te encuentras en una situación complicada y es normal que no tengas del todo claro quién debería dar el primer paso. ¿Es algo que solo te preocupa a ti? ¿Está realmente en juego tu relación de pareja? ¿Quién debería coger el toro por los cuernos y lanzarse a decir algo? Martín nos cuenta que al final, como en cualquier interacción, toda persona implicada tiene su parte de responsabilidad. “Si hablamos de quién debe encargarse de tratar este tema en la pareja, por supuesto que la responsabilidad final recae en las dos personas que conforman dicha pareja. Sin embargo, si es una cuestión de actitudes, las amistades también pueden poner de su parte para adaptarse a este nuevo contexto en el que hay una persona más en el grupo”.
La psicóloga experta nos da un último tip esperanzador y sin duda es algo que tenemos que tener más presente cuando nos enfrentamos a este tipo de situaciones poco agradables. “No siempre nos vamos a llevar genial con todo el mundo. Pero se trata de que haya una relación suficientemente cordial o correcta como para que no cause malestar a ninguna de las partes. Y eso es un esfuerzo común”. Así que ya sabes, si no te gustan los amigos de tu pareja, be water, my friend.