¿Sientes que algo está fuera de lugar en tu relación? Las señales de que tu pareja es infiel y te engaña pueden ser sutiles pero reveladoras. Desde cambios en el comportamiento hasta patrones de comunicación inusuales, conocer estas señales podría ayudarte a abordar cualquier inquietud que puedas tener sobre la fidelidad en tu relación.
En plena era de la comunicación y sin poder obviar el cambio social que han supuesto los teléfonos móviles, la mayor parte de las conductas de una persona infiel giran en torno a estos dispositivos. Por esta razón, uno de los elementos que más debemos de tener en cuenta para saber si nuestra pareja nos está siendo infiel, es su relación con su teléfono móvil.
En primer lugar debes saber que todas las conductas de una persona infiel se relacionan con cambios de patrones, es decir, algo que nunca ha hecho con anterioridad y que, de repente comienza a hacerlas.
No existe un manual de instrucciones para descubrir una infidelidad, sin embargo, teniendo en cuenta que tú eres una de las personas que mejor conoce a tu pareja, lo que más te va a ayudar es observas estos cambios en su comportamiento.
Ahora bien, si de toda la lista que vas a leer a continuación solo identificas en tu pareja un par de puntos o tres, ¡no te alarmes!. Si notas (de forma permanente) cuatro o más puntos de esta lista, ve prestando atención porque, muy posiblemente, algo está pasando…
No se separa de su móvil ni para ducharse
Como hemos mencionado al comienzo de este artículo, el teléfono móvil es el gran cómplice de la persona infiel y, al mismo tiempo, su mayor delator. Si notas que tu pareja te pone excusas cada vez que le pides prestado su teléfono para poner una canción o buscar algo en Google… empieza a pensar que hay algo en ese cacharro que no quiere que veas.
Modo avión
La segunda señal que debería hacernos sospechar es si observamos que cada vez que nuestra pareja está con nosotros tiene activado el modo avión.
¿Por qué razón una persona iba a tener activado el modo avión si no se encuentra en un avión (entiéndase reunión de trabajo, consulta médica, etc…) ? La respuesta más probable es porque no quieren que lo molesten mientras está contigo… o que aparezca un nombre sospechoso en forma de llamada entrante o de Whatsapp inoportuno.
Si además observas que tu pareja deja siempre la pantalla del móvil hacia abajo, es una señal de seguridad para evitar dejar a la vista las notificaciones de la pantalla.
Borra los historiales de los mensajes
Una de las señales de que tu pareja es infiel y te engaña es cuando notas que hay conversaciones que… ¡desaparecen! y cuando vas al chat… ¡sorpresa, está vacío! Mucha gente borra los historiales de los mensajes recibidos en apps de mensajería como Whatsapp o Telegram por no ocupar más espacio de la cuenta en la memoria del teléfono, pero si observas que tu pareja de repente comienza a borrar los historiales de sus conversaciones y es algo que antes no hacía, no está de más que comiences a sospechar que algo pasa.
Su comportamiento en RRSS
Si a tu pareja nunca le había importado subir fotos contigo en RRSS o que tu lo etiquetaras en publicaciones y de repente, de un día para otro, restringe el acceso o ves que no sube ninguna foto contigo, empieza a sospechar que algo ocurre. La razón es bien sencilla: si tu pareja está intentando tener una relación paralela con otra persona, lo último que quiere es que esa persona lo vea contigo. Simple.
Cambios en su aspecto físico y en su higiene
¿Tu pareja ha vuelto al gimnasio después de una larga temporada sin levantar pesas? ¿De repente le ha dado por salir a hacer running? ¿Ves que comienza una dieta nueva o que ha cambiado de perfume? Ya sabes… muy posiblemente hizo lo mismo cuando empezó a conocerte y quiso conquistarte.
A menos que sea por cuestiones de salud o porque verdaderamente tu pareja engordó y deba bajar de peso…
Cambios en horarios
Si tu pareja de repente empieza a tener más reuniones de lo normal o más comidas de trabajo de la cuenta y su horario se ve afectado por un largo periodo de tiempo, sin que haya habido un cambio de jefe, o ascenso o motivos que verdaderamente justifiquen esas llegadas a deshoras… ¡alarma!
Cambios de humor o de actitud
Si notas que el mal humor empieza a ser una constante en tu pareja y que no hace un esfuerzo por hablar el problema y ponerle solución, hay una alta probabilidad de que algo esté pasando en su mundo afectivo.
También puede suceder al contrario, que de repente empieza a decirte más piropos o es más cariñoso de la cuenta. Esto puede deberse a que quiera compensar «algo» que sabe que no está haciendo bien.
Mentiras, falta de confianza y comunicación
Si empiezas a percibir que tu pareja ya no se abre contigo y no te cuenta sus miedos, sus preocupaciones, sus sueños y sus pensamientos, puede que tampoco te cuente otras cosas importantes.
Si empiezas a descubrir mentiras absurdas que terminas descubriendo por obra y gracia del destino… ¡sospecha!. Toda mentira relacionada con lugares a los que fue o personas con las que estuvo es un motivo de peso para que dudes de sus sentimientos hacia ti.
Conflictos sin solucionar
Una de las causas más frecuentes de infidelidad es el deterioro de la relación. Si existen problemas que no se han hablado, es normal que la relación se vaya enfriando y que tu pareja y tú os vayáis distanciando.
Si los problemas aumentan y el afecto disminuye, ten cuidado porque estáis cultivando una situación en la que la infidelidad se puede dar más fácilmente.
Celos
Los celos son un claro síntoma de complejos e inseguridad. Si bien es cierto que existen los llamados «celillos sanos» -que son una muestra de amor y admiración en su justa y mínima medida- por norma general, los celos son el gran virus de las relaciones en pareja. Los celos suelen presentarse en forma de control y, cuando una persona siente la necesidad de controlar a su pareja, significa que no está a gusto en esa relación.
Problemas sexuales
La última en de las señales de que tu pareja es infiel y te engaña es cuando cada vez hay más excusas para… eso. En el terreno sexual lo importante es estar de acuerdo en las prácticas y la frecuencia. La infidelidad es menos probable si tu pareja y tú mantenéis una actividad sexual placentera y beneficiosa para ambos. Por ello, es importante hablar del tema abiertamente.
En última instancia, la confianza y la comunicación son fundamentales en cualquier relación. Si has notado algunas de las señales de que tu pareja es infiel y te engaña, es importante abordar tus preocupaciones con respeto y honestidad. Ya sea para aclarar malentendidos o tomar decisiones difíciles, enfrentar la realidad puede ser el primer paso hacia la resolución. Recuerda, estar atento a estas señales podría salvarte de futuros desafíos en tu relación.
Un vistazo a los rasgos psicológicos comunes del infiel
Para no caer en las mentiras de los trileros del amor, independientemente de si son hombre o mujer, conviene saber cuáles son los comportamientos de un infiel. El psicólogo Alexandre Pérez, que tiene mucha mili en relaciones disfuncionales, desgrana el perfil típico de un infiel.
Según el experto, hay ciertos características psicológicas que suelen ser comunes en las personas que son infieles. Uno de estas es la tendencia a evitar el compromiso, no solo en las relaciones amorosas sino en diferentes áreas de la vida. Esto puede manifestarse como “una resistencia a hacer planes a largo plazo o una dificultad para cumplir promesas y compromisos”.
Otro rasgo es la búsqueda constante de gratificación. Los infieles a menudo “buscan recompensas inmediatas y tienen dificultades para resistir tentaciones”, lo que puede llevarlos a buscar nuevas emociones sin considerar las consecuencias a largo plazo. Además, Pérez señala que esto va ligado al narcisismo, pues alguien que se preocupa excesivamente por sí mismo puede sentir necesidad de verse adulado por los demás, lo que les hace más propensos a engañar a sus parejas. Si a esto se le añade falta de empatía, es posible que al infiel le resulte mucho más sencillo tomar decisiones que dañen a terceros y que no les importe: “Sus necesidades de reafirmación y validación están satisfechas, y eso es lo único que les importa”.
Además, Pérez destaca la capacidad de manipulación como otro rasgo común: “Una característica alarmante de muchos infieles es su habilidad para manipular a las personas y las situaciones a su favor. Utilizan esta habilidad para encubrir su comportamiento y minimizar las consecuencias, lo que incluye desde mentiras directas hasta convencer a otros de que sus percepciones de la realidad están equivocadas». Aunque parezca mentira, realmente consiguen influir en su entorno para mantener sus secretos y continuar con sus comportamientos de infiel sin ser detectados.
Cuando el amor se enturbia: reconocer los signos de infidelidad
¿Alguna vez has sentido que algo no va bien en tu relación? Pérez argumenta que hay comportamientos típicos en quienes tienen un pie fuera de la relación. «Hay rasgos de personalidad que son comunes en las personas infieles», apunta. Esos comportamientos pueden ser sutiles al principio, pero generalmente forman un patrón que, si aprendemos a identificar, puede ahorrarnos un buen disgusto.
¿Y cuáles son esos comportamientos? Pues cosas como una súbita necesidad de privacidad que antes no existía, o cambios en los horarios sin mucha explicación. Si tu pareja, que antes dejaba su móvil por cualquier lado, de repente parece que tiene algo que ocultar, podría ser una señal evidente.
Pérez sugiere que estar atentos a estas pequeñas pistas puede darnos una idea más clara antes de que la situación empeore. No se trata de volverse paranoico, claro, pero sí de no ignorar lo evidente.
¿Qué hacer cuando un infiel lo niega todo?
Enfrentarse a la negación es otra de las batallas que hay que librar. Cuando te encuentras a alguien sospechoso de infidelidad, no es raro que lo niegue todo. Según Pérez, esta actitud es habitual y forma parte del comportamiento de la persona infiel: «Cuando una persona infiel lo niega todo, es fundamental fijarse en su forma de actuar. ¿Es evasivo? ¿Son incoherentes sus explicaciones? ¿Se pone tan nervioso que ni puede hablar? Estas reacciones pueden ser muy reveladoras”.
Esto es delicado, porque nadie quiere pensar que su pareja le está siendo infiel. Sin embargo, si ya has notado señales y todo apunta en esa dirección, puede que sea necesario asumir la realidad para seguir adelante, ya sea juntos o por separado. Pérez sugiere que, cuando hay una fuerte sospecha, es el momento de poner las cartas sobre la mesa y, en función de la reacción del acusado, se podrá decidir si es posible reconstruir la confianza o si es mejor seguir cada uno por su lado.
¿Puede un infiel cambiar?
Esta es la gran pregunta. Según Pérez, la respuesta es sí, un infiel puede cambiar, pero no sin esforzarse mucho, en el caso de que quiera hacerlo. El cambio requiere “un deseo genuino por parte de la persona infiel de modificar su comportamiento” y, a menudo, una “considerable introspección y trabajo personal”. Pérez recalca que el cambio es posible con la ayuda adecuada, como terapia o consejería, que pueden proporcionar las herramientas necesarias para “entender y modificar los patrones de comportamiento destructivos”.
Sin embargo, Pérez también advierte que el cambio debe venir acompañado de “transparencia y esfuerzos consistentes” para reconstruir la confianza dañada. Un aspecto crucial es que tanto el infiel como su pareja – también es posible que alguien desleal crónico que esté soltero quiera poner remedio – deben estar dispuestos a trabajar juntos en la relación si deciden seguir adelante. Esto implica comunicación abierta sobre las necesidades y expectativas, siendo conscientes que siempre habrá una mínima tentación, y la “disposición para perdonar y reconstruir la relación paso a paso” para que los comportamientos de infiel no se vuelvan a repetir.
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