Si últimamente no dejas de pensar que tu relación de pareja es aburrida o ha pasado a un plano menos excitante, no te preocupes porque tiene solución. Nuestra psicóloga nos explica cómo se puede salir de este bucle.
Mires a donde mires, todo el mundo está crazy in love, mientras tú sientes que tu relación de pareja es aburrida, monótona y básicamente ha perdido fuelle. Aunque sea un sentimiento totalmente natural en el desarrollo de una relación, también es cierto que es una sensación que te hace replantearte muchas cosas. Entre ellas, tu amor hacia la otra persona, vuestra posible incompatibilidad en el plano sexual o el futuro que tenéis juntos. Pero ¿qué pasa, que el aburrimiento es solo cosa tuya? ¿Estás haciendo algo para remediarlo? ¿Acaso la pareja ha pasado a otra fase y tú no estás listo para dejar de lado la pasión del principio? Las dudas se amontonan, aumenta la desesperación y solo nos queda jugar una baza: “cariño, ¿deberíamos ir a terapia?”
¿Por qué siento que mi relación de pareja es aburrida?
En las relaciones, a veces, puede llegar un punto en el que se pierde la motivación inicial. Esa famosa “chispa” de la que todo el mundo habla se apaga o, mejor dicho, se transforma en un día a día rutinario que viene acompañado de un sentimiento de aburrimiento por hacer siempre lo mismo y perder ese “algo” emocionante. Hay parejas que saben gestionarlo mejor, otras a las que quizás les cuesta un poco más. Pero, en general, todas tienen algo en común y en esto María Romero Girón, psicóloga clínica especializada en relaciones, nos señala cuáles pueden ser las principales causas.
La experta explica que en terapia suele haber casos relacionados con carencias en el terreno de la sexualidad, al menos para uno de los miembros. La clásica pereza sexual o la descoordinación en el deseo, que lleva a uno de los dos a pensar que la relación de pareja se ha vuelto aburrida (cuando puede haber muchas más variables en juego más allá de la rutina). Otro de los casos y probablemente el más frecuente cuando se reflexiona sobre el aburrimiento en la pareja, “es la falta de tiempo de calidad porque no hay un proyecto de vida compartido. Algo que puede venir acompañado también de una falta en la novedad y sobre todo en la verdadera intimidad”.
“El tiempo de calidad es un concepto muy importante en este asunto”, dice Romero recalcando que no es lo mismo cantidad que calidad. “Muchas veces pensamos que ese momento en el que los dos estamos juntos en el salón haciendo cada uno una cosa distinta es tiempo de calidad. Pero para nada es así. Realmente el tiempo de calidad se parecería más bien a algo tan sencillo como elegir una receta para cenar e implicarse ambos en hacerla realidad”. La idea, según cuenta la experta, es que se propongan actividades para hacer juntos y se vayan realizando poco a poco para no caer en esa temida rutina. Esto no significa que haya que estar haciendo cosas nuevas constantemente, pero sí ir añadiendo pequeños momentos para disfrutar de la compañía del otro.
¿Qué hacer cuando una pareja entra en la monotonía?
Romero nos explica que la monotonía tiene que ver con las fases de la relación. En la primera etapa, que es la del enamoramiento, existe en nosotros un desajuste hormonal muy grande. De ahí que sea habitual idealizar a la otra persona, ver únicamente sus virtudes y que todo, en general, nos parezca maravilloso. Estamos en una nube y en ese momento más que nunca se hace realidad eso de que “el amor es ciego”.
Sin embargo, cuando pasamos a la segunda fase, a la del amor y la intimidad, la cosa cambia. Es aquí donde realmente pueden aparecer esos signos de aburrimiento, pero no tiene por qué significar que la relación va mal. “Puedes sentir que tu relación de pareja te aburre pero esto no quiere decir que no os sigáis queriendo”. Lo que habría que hacer es plantear cambios para salir de esa monotonía.
Por supuesto que hay que trabajar las cosas y no simplemente dejar que se terminen apagando por inercia. “Tener mucha comunicación para hacer cosas nuevas es fundamental, tanto en el plano cotidiano como en la intimidad sexual. Además, es importante buscar qué os gustaría hacer para pasar más tiempo de calidad y ambos poner de vuestra parte para verdaderamente llevarlo a cabo”. Si hay un problema en la pareja, no se soluciona de forma mágica. Sin duda, requiere de un esfuerzo activo por ambas partes.
¿Por qué te aburre una relación de pareja sana?
Algo muy común, nos cuenta Romero, es pensar que tu relación de pareja sana, tranquila y emocionalmente estable es aburrida, si anteriormente has estado en relaciones tóxicas. Y muchas veces incluso intentas interrumpir inconscientemente el rumbo natural de esta relación con comportamientos negativos como una forma de buscar ese excitement. ¿Por qué ocurre esto? “Las relaciones ‘montaña rusa’ muestran el mecanismo de un refuerzo intermitente. En ellas se libera mucha oxitocina y dopamina debido a que es un subidón constante de emociones. Esto genera mucho enganche y por eso uno no está aburrido. Porque siempre hay incertidumbre, ansiedad y eso es lo que te mantiene para arriba y para abajo constantemente. Es un mecanismo similar al de una droga y los circuitos que se activan en el cerebro son prácticamente los mismos”.
Por eso, antes de recurrir a esa montaña rusa de emociones, hay que entender que las relaciones evolucionan. Después de la etapa de enamoramiento y pasión hay que trabajar en mantener la magia. “No es malo aburrirse en algunos momentos de la relación, de hecho es completamente normal. Lo que pasa es que hay personas que están enganchadas al momento ‘luna de miel’, donde se siente ese subidón. Y realmente habría que romper con la creencia de que una relación es ese chute de emociones y hormonas del principio. La relación avanza y se ganan otras cosas como la confianza, el compromiso y la mayor estabilidad”.
Pero aún con todo esto, sí que hay que trabajar para que esa monotonía no exista permanentemente. “Se puede lograr una relación de pareja estable, que no resulte aburrida y donde haya momentos de calidad que nos hagan ilusión y nos emocionen, pero desde un plano diferente al de la fase de enamoramiento”. La cosa está en ponerse manos a la obra para conseguirlo.
¿Cómo hacer que la relación deje de ser aburrida?
Romero utiliza una metáfora en terapia para dar ciertas herramientas de cara a trabajar en esta sensación de aburrimiento. “Una relación es como un armario de 3 puertas. La puerta del medio es la relación, la de la izquierda es un miembro de la pareja y la de la derecha es el otro. Hay que hacer cosas en común para cuidar la puerta del medio, pero también cada uno debe cuidarse a sí mismo por separado. Lo que ocurre muchas veces es que existe un desajuste y hacemos tantas cosas cada uno en su puerta que no cuidamos la de la relación”. ¿Qué se puede hacer? Buscar pequeñas cosas novedosas a corto y medio plazo, como por ejemplo preparar juntos una cena especial o ir a ver una nueva obra de teatro. Son soluciones muy sencillas que no requieren de un gran esfuerzo pero pueden tener un impacto enorme.
“El objetivo es tener un compromiso compartido en la relación. Ilusionarse por un viaje futuro o un proyecto común que vaya en sintonía con ambos. No es necesario tener las mismas aficiones pero sí la intención de pasar tiempo de calidad”. Y lo mismo ocurre si sientes que tu relación de pareja te aburre en el terreno de la sexualidad. Es frecuente cuando se cae en la rutina y se deja poco espacio para la innovación. Por eso, Romero aconseja fomentar la pasión añadiendo nuevos estímulos. “Lo principal, antes de nada, es tener mucha más comunicación para ver dónde siento que está ese aburrimiento. Si es más bien en las actividades conjuntas del día a día, en cuestiones sexuales o si está descompensado el tiempo que alguno de los miembros dedica a la pareja”.
Debemos medir dónde está localizado el problema y cómo podemos solucionarlo. Y a partir de ahí vamos construyendo. “Es muy importante ver qué le está fallando a la otra persona. Si quiero a mi pareja y a mi relación y veo que hay algo que no está bien, ya sea en la sexualidad o en cuanto al tiempo de calidad, hay que trabajar en ello conjuntamente para solucionarlo”, comenta Romero. Y es que una relación de pareja puede ser aburrida a veces y es totalmente normal, pero la clave está en poner toda la carne en el asador para que vuelva el fuego.