Descubre los secretos para tener una memoria prodigiosa: Trucos, factores clave y más para recordar todo lo que aprendemos
En la era digital, donde la información fluye rápidamente a través de dispositivos electrónicos y las redes sociales dominan nuestras vidas, muchas personas han experimentado dificultades crecientes para retener información, memorizar y concentrarse. Este fenómeno ha planteado interrogantes sobre cómo la eclosión digital y el uso constante de dispositivos electrónicos han impactado nuestra capacidad cognitiva.
LA DISTRACCIÓN DIGITAL Y LA ATENCIÓN FRAGMENTADA
Uno de los desafíos clave en la era digital es la distracción constante a la que estamos expuestos. Los dispositivos electrónicos nos mantienen conectados a un flujo interminable de notificaciones, mensajes y contenido en línea, lo que dificulta nuestra capacidad para mantener la atención enfocada en una sola tarea. La atención fragmentada resultante puede afectar negativamente nuestra capacidad para retener información de manera efectiva, ya que la consolidación de la memoria requiere un enfoque sostenido y una mínima interferencia.
EL EFECTO DE LA MULTITAREA DIGITAL
La multitarea, a menudo promovida por la presencia de múltiples dispositivos electrónicos, también contribuye a la dificultad para retener información. Aunque muchos creen que pueden realizar varias tareas a la vez, la investigación ha demostrado que el cerebro humano no es efectivo en la multitarea real. Cambiar rápidamente entre diferentes actividades afecta la capacidad de codificar y consolidar información en la memoria a largo plazo. Como resultado, puede ser más difícil recordar lo que hemos aprendido o experimentado.
EL IMPACTO DE LAS REDES SOCIALES EN LA MEMORIA
Las redes sociales, aunque pueden ser herramientas poderosas para la comunicación y el intercambio de información, también han sido objeto de críticas en términos de su influencia en nuestra memoria. La sobreexposición a una gran cantidad de información en línea, a menudo en forma de publicaciones breves y fragmentadas, ha llevado a un cambio en nuestros patrones de consumo de información. Este cambio hacia la información de fácil digestión y la gratificación instantánea puede reducir nuestra capacidad de retener información compleja y profunda.
FACTORES QUE INFLUYEN EN NUESTRA CAPACIDAD DE RECORDAR
Existen muchos factores que influyen en nuestra capacidad de recordar y están muy relacionados con nuestra capacidad de atención, concentración y nuestro nivel de estrés. La calidad del sueño que tenemos, nuestra alimentación, el ejercicio y nuestro estado de salud en general va a impactar en estos factores.
La psicóloga Olga Garrido asegura que “es importante tener en cuenta que las experiencias emocionales intensas suelen ser más fáciles de recordar”. Además, podemos utilizar también técnicas de memorización que mejoren nuestra capacidad de recordar.
Según los expertos, la hipertimesia es una condición sumamente inusual en la cual la persona posee una capacidad de memoria excepcionalmente detallada y precisa. Aquellos que experimentan esta condición tienen la habilidad de recordar eventos pasados con un nivel de minuciosidad asombroso, pudiendo evocar incluso los detalles más insignificantes. La hipertimesia es considerada una facultad extraordinaria, ya que contrasta significativamente con la memoria promedio de la población.
Aunque la causa exacta de esta condición aún no se comprende completamente, se ha sugerido que puede estar relacionada con una actividad cerebral anormal en áreas específicas encargadas del procesamiento y almacenamiento de la información. Los estudios sobre la hipertimesia se centran en desentrañar los misterios de este fenómeno para así obtener una mejor comprensión de la memoria humana en general, y tal vez, en el futuro, brindar avances en el tratamiento de condiciones relacionadas con la memoria.
“Las personas con hipertimesia pueden recordar eventos y detalles de su vida diaria con gran detalle, incluso años después de haberlos experimentado” explica la psicóloga Olga Garrido.
El artista inglés Stephen Wilshire es capaz de dibujar completamente de memoria y con una precisión exacta ciudades como México o Nueva York después de sobrevolarlas en helicóptero durante apenas 30 minutos.
TÉCNICAS PARA MEJORAR NUESTRA CAPACIDAD DE MEMORIZACIÓN
Aunque, como mencionamos, es una situación poco común, existen técnicas que nos ayudan a mejorar nuestra capacidad de recordar. Teniendo en cuenta los factores comentados anteriormente relacionados con nuestro bienestar, pueden ser de ayuda:
La repetición
La repetición y la práctica constante de la información que queremos recordar puede servirnos de gran ayuda.
La asociación de la información
La asociación de la información con imágenes o palabras clave para facilitar la recuperación de la información también es un aspecto clave.
La mnemotecnia
Otra técnica puede ser el uso de técnicas te mnemotecnia, como la creación de acrónimos, el desarrollo de historias, la utilización de rimas, etc. Esta técnica es muy utilizada en anatomía. Con ella se asocia contenido fácil de recordar a algo que necesitamos memorizar, se las considera de asociación y memoria a la vez.
Categorías
La organización de la información en categorías o grupos para facilitar la recuperación de la información. Para desarrollarla tenemos que conocer cómo funciona nuestra memoria, ya que comprenderla nos permitirá recordar las cosas a largo plazo.
Método Dominic
Algunos expertos explican que este método es muy útil para recordar listas de números. Por ejemplo, en vez de recordar todos los números que tienes que memorizar, asocias al número una letra y en base a esa letra te acuerdas de una actividad, un lugar y un personaje. De esta forma es mucho más fácil recordar 5 escenarios con 5 personajes y 5 actividades que 15 números de manera absoluta.
Además, según los expertos, para lograrlo se genera algo raro en el cerebro, cuanto más raro sea el lugar que has elegido para asociar el número mejor, y eso pasa lo mismo con las actividades raras y los personajes raros.
Palacio de la memoria
Esta técnica es extremadamente útil. El palacio representa un lugar que tengas en mente que conozcas muy bien, que sepas claramente cómo es y donde tengas un recorrido que haces con frecuencia, como, por ejemplo, el recorrido que haces cuando llegas a casa. Esto se suele utilizar para realizar una lista y acordarte del orden.
Pero, ¿cómo funciona? Es muy sencillo. Primero realizas una lista y vas poniendo los diferentes ítems dentro de tu recorrido de una manera que asocies cada uno con una cosa. Por ejemplo, si entras en casa y lo primero que tienes en casa es un mueble naranja, puedes apuntar en la lista que tienes que comprar zanahorias, lo siguiente que veo es un perchero, pues sé que en la lista ponía comprar un botón, etc.
Esta técnica no sólo se puede utilizar para listas de la compra, ya que, si en vez de imaginarnos una habitación realizamos un dibujo, podremos ir dándole valores a los diferentes dibujos que realicemos. El palacio de la memoria funciona como un recorrido donde tú anclas cosas en ese recorrido.
Pero no se queda ahí, sino que puede funcionar aún mejor si añadimos otras técnicas que lo hagan más raro o más extraño, esto hará que sea más memorizable.
Estas técnicas se centran en trabajar la parte de la memoria, pero para recordar también podemos poner énfasis en la capacidad de atención, de concentración y de resiliencia emocional. En esta última, las técnicas que hay tienen que ver con exponernos de alguna manera a una situación incómoda para ampliar nuestra zona de confort.
¿CÓMO PODEMOS ENTRENAR LA CONCENTRACIÓN?
Nuestra concentración tiene un papel fundamental, con lo que cualquier actividad que esté dirigida a manejarla adecuadamente va a tener un impacto positivo, “entre los que podemos realizar están: la meditación, eliminar los distractores, la creación de hábitos que la impulsen y la gestión adecuada del tiempo”, explica la psicóloga Olga Garrido.
La capacidad de atención depende de las redes neuronales y de los neurotransmisores. Necesitamos la materia prima que necesitan las neuronas para comunicarse entre sí para mantener la atención a lo largo del tiempo. Los expertos explican que para lograr este proceso existen tres maneras:
Aumenta la acetilcolina en tu dieta
En primer lugar, sustancias como la acetilcolina son necesarias para la comunicación interneuronal y permiten mantener la atención más tiempo. Se trata de un neurotransmisor que nos ayuda a mejorar nuestra capacidad de memoria, así como la capacidad de atención más tarde.
Algunos de los alimentos con alto contenido de colina y que, por tanto, pueden ayudar a respaldar la síntesis de acetilcolina, son los huevos sobre todo las yemas, el pavo y el pollo, los garbanzos, frijoles, las nueces, la avena o el bacalao.
Controla los excesos de dopamina
En segundo lugar, podemos regular los neurotransmisores, los cuales nos van a permitir mantenernos motivados durante el estudio o cuando queramos memorizar algo. Si no regulamos los niveles de dopamina es muy difícil mantener la concentración por largos periodos de tiempo. Ese proceso necesita mejorar la dopamina o eliminar los obstáculos, como actividades que generan un alto nivel de estímulo como jugar a videojuegos.
Practica la meditación
La meditación, una disciplina ancestral, se ha demostrado eficaz para fortalecer la concentración y la atención plena. Al practicar la meditación de manera regular, entrenamos nuestra mente para focalizarse en el momento presente y desarrollar una mayor conciencia de nuestros pensamientos y emociones. Este enfoque consciente ayuda a reducir la distracción mental, permitiéndonos dirigir nuestra atención hacia una tarea específica y mantenerla durante períodos más prolongados.
La meditación ha sido asociada con cambios estructurales en el cerebro, como un aumento en el grosor de la corteza prefrontal, una región involucrada en la regulación de la atención y la toma de decisiones.
Practica entrenamientos de fuerza regularmente
Los entrenamientos de fuerza también desempeñan un papel crucial en la mejora de la concentración y la creación de conexiones neuronales nuevas. Durante la práctica de ejercicios de fuerza, se produce una liberación de neuroquímicos, como la dopamina y la serotonina, que están relacionados con el estado de ánimo y la función cognitiva. Estos neurotransmisores promueven la plasticidad cerebral, permitiendo la formación de nuevas conexiones entre las células cerebrales.
Asimismo, el ejercicio físico mejora el flujo sanguíneo hacia el cerebro, proporcionando nutrientes y oxígeno necesarios para su correcto funcionamiento. Esto contribuye a una mejor claridad mental, mayor enfoque y la capacidad de realizar tareas cognitivas con mayor eficiencia.
Todo lo que hagamos por construir redes neuronales que aceleren el proceso de entrenamiento nos ayudará a tener mejores resultados. Además, tendremos que entrenar la capacidad de atención y eso necesita que conectemos neuronas que a lo mejor antes no conectábamos por diferentes factores. A partir de aquí se generarán conexiones neuronales nuevas, es decir, plasticidad neuronal. Para desarrollar esto necesito o bien llevar a cabo una dieta rica en grasa tomando omega 3 o bien mediante ejercicios de fuerza.
También es importante mejorar la calidad de sueño y mejorar los entrenamientos que aceleran las conexiones neuronales.
Existen muchos factores que influyen en nuestra capacidad de recordar y están muy relacionados con nuestra capacidad de atención y concentración, pero si utilizamos técnicas avaladas por los expertos podemos conseguir recordar todo aquello que aprendemos.
Artículo publicado por Nuria Santos
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