Seguramente a estas alturas ya te hayas topado con algunas de esas fotos que inundan Instagram o TikTok del antes y después de hombres que han pasado de tener una mandíbula «metida para adentro» a una mandíbula al más puro estilo Henry Cavill. Y es que la «masculinización facial» se ha puesto muy de moda.
La mandíbula es uno de los rasgos que más llama la atención en el rostro masculino, y una bien definida no solo se asocia con masculinidad, sino también con salud.
Numerosos estudios han demostrado que, durante la adolescencia y la post adolescencia, mantener niveles óptimos de testosterona marca la diferencia. Unos niveles buenos de testosterona durante estas etapas tempranas de la vida no solo influye en el desarrollo de la mandíbula, sino también en otros rasgos, como la nuez prominente. Pero, ¿qué tiene una mandíbula cuadrada que la hace tan atractiva a ojos de los demás?
La respuesta parece estar en la evolución. Una mandíbula fuerte y definida es percibida como una señal de virilidad y salud. En otras palabras, es un indicador de buena genética. Y si hablamos de atractivo, la simetría facial, en la que una mandíbula bien proporcionada juega un papel clave, siempre roba miradas.
¿Significa esto que solo las mandíbulas cuadradas son atractivas? Para nada. El atractivo no se mide por un solo rasgo (mucho menos por la forma de la mandíbula!) . Es una combinación de características que hacen única a cada persona. Pero si quieres resaltar tu mandíbula, estás en el lugar correcto.
Cómo marcar la mandíbula rápido
Si buscas resultados inmediatos y no quieres esperar un proceso natural, los rellenos son tu mejor aliado. Hay dos tipos principales recomendados para marcar la mandíbula: el ácido hialurónico y la hidroxiapatita cálcica (también conocida como Radiesse). Aunque ambos cumplen la misma función, el Radiesse tiene una textura más densa y ofrece resultados más duraderos, mientras que el ácido hialurónico se reabsorbe más rápido.
Pero antes de lanzarte a una clínica de medicina estética, hay cosas clave que debes tener en cuenta:
- Elige bien el centro y al profesional. Este tipo de tratamientos se han popularizado muchísimo en los últimos años, pero eso no significa que todos los que los ofrecen estén debidamente cualificados. Es fundamental que el médico tenga conocimientos profundos sobre la anatomía del rostro y que el centro cuente con instalaciones adecuadas y certificadas, así como con los productos homologados.
- Ten en cuenta tus hábitos. Si fumas, consumes alcohol o eres muy activo físicamente, estos rellenos se reabsorben más rápido. Por eso, el profesional debe conocer tu estilo de vida antes de recomendarte cualquier tratamiento.
- Los rellenos no son permanentes y siempre dejan un sedimento. Aunque se reabsorban con el tiempo, siempre dejan un sedimento en tu cuerpo que no desaparece por completo. Además, al ser un gel aplicado de forma superficial, es normal que los rellenos se desplacen con el movimiento diario. Esto hace que el efecto no se mantenga exactamente igual a como se ve recién aplicado. Y por cierto… obviamente, no se reabsorben al mismo tiempo en cada lado de la cara…
- Evita saturar tu rostro. Después de un par de meses, es probable que te acostumbres tanto al relleno que sientas que necesitas más. ¡Cuidado con caer en este error! Poner más rellenos podría provocar un aspecto hinchado y antinatural.
Cómo marcar rápido la mandíbula con ácido hialurónico
Cuando decides realizarte una marcación mandibular, el proceso debe siempre empezar con un análisis detallado de tu rostro. El médico evaluará la morfología de tu cara, prestando atención a la estructura ósea y muscular, para determinar cómo resaltar tu mandíbula de la manera más armónica posible.
Una vez realizado este análisis, el médico marcará con un lápiz blanco los puntos clave donde aplicará el producto. Por lo general, estos puntos incluyen el ángulo mandibular, que es la zona que da la forma cuadrada y definida a la mandíbula, y a lo largo del mentón, para aportar longitud y proyección si es necesario. Dependiendo de tus características faciales y del resultado que desees, es posible que se utilice más de un vial de producto. Por ejemplo, si buscas un efecto muy marcado y prominente, se necesitarán mayores cantidades para conseguir un contorno más definido.
La aplicación del relleno se realiza con agujas finas o cánulas para mayor precisión y seguridad. Aunque el proceso es prácticamente indoloro, pueden utilizar anestesia local para minimizar cualquier molestia. En cuestión de minutos, el gel se distribuye estratégicamente, esculpiendo la mandíbula de forma inmediata.
Lo mejor de este tratamiento es que no requiere reposo. Puedes volver a tus actividades diarias al instante. Eso sí, se suelen dar algunas recomendaciones básicas: evitar la exposición directa al sol durante las primeras 24-48 horas y asegurarte de mantenerte bien hidratado para ayudar a que el producto se asiente mejor en los tejidos. Estas precauciones ayudan a optimizar los resultados y prevenir posibles molestias.
Con este procedimiento, obtendrás una mandíbula definida al instante, sin necesidad de pasar por quirófano ni largos periodos de recuperación.
Los rellenos son una buena solución temporal para marcar la mandíbula rápidamente, pero no son una respuesta definitiva. Si lo que buscas es un cambio duradero y más natural, es importante que entiendas que los cambios en el físico llevan tiempo y son el resultado de unos objetivos claros y constancia, también en lo que a la mandíbula se refiere.
Cómo marcar la mandíbula para siempre
Aunque los rellenos ofrecen un efecto inmediato, no son una solución permanente. Además de su precio, que puede oscilar entre los 350 € y los 500 € por vial, su duración limitada los convierte en un remedio temporal. Si buscas un cambio definitivo, el primer paso es entender por qué tu mandíbula no se ha desarrollado como esperabas.
Si bien es cierto que aquí la genética juega un papel clave, aquí viene la buena noticia: todos tenemos el hueso mandibular, y con el enfoque adecuado, puedes marcarlo y definirlo de forma permanente.
El primer paso es visitar a un ortodoncista. ¿Por qué? Porque gran parte del desarrollo de la mandíbula depende de una mordida correcta. Si tus dientes no están alineados de forma adecuada, esto afecta directamente a tu tipo de mordida y, por tanto, al desarrollo de tu mandíbula (y, en consecuencia, a la armonía de tu rostro). Solo un tratamiento de ortodoncia puede corregir este problema para siempre y preparar tu mandíbula para su pleno desarrollo.
La ortodoncia es un proceso que requiere tiempo y dinero, pero es una inversión a largo plazo. Cuando tus dientes cierren correctamente, no solo habrás solucionado el problema funcional, sino que también habrás sentado las bases para un rostro más simétrico y definido.
Con una mordida correcta, el siguiente paso será desarrollar la musculatura que recubra el hueso mandibular. Si bien es cierto que estos músculos que cubren el ángulo mandibular se desarrollan de forma natural, también hay ejercicios específicos y hábitos que tonifiquen los músculos faciales: cardio, ejercicios de fuerza y la combinación de ambos, como el Hiit o el Crossfit ya han demostrados tener unos efectos directos en el desarrollo óptimo de todo el cuerpo (en gran parte debido al aumento de testosterona que supone realizar este tipo de entrenamientos de fuerza). Así, conseguirás marcar la mandíbula, sin necesidad de recurrir a tratamientos de medicina estética temporales que terminen por desformarte el rostro y que, a medio plazo siempre terminan teniendo unos resultados muy poco naturales.