Dependiendo de tu edad y personalidad, hacer amigos puede ser pan comido o todo lo contrario. Si tu caso es el segundo, toma nota de estos consejos de expertos.
Dicen que los amigos son la familia que eliges, pero el reto viene cuando tienes que hacer nuevas amistades en medio de trabajos, proyectos personales y tareas del día a día que más que ayudar, convierten este objetivo en todo un reto. De hecho, está demostrado que el apoyo social es uno de los mejores amortiguadores de la ansiedad. Pero, como explican los psicólogos, también puede ser el área que mayor estrés nos produce cuando existen carencias. Por eso, si ya te rodeas de amistades sanas, significa que tienes las herramientas para continuar ampliando tu red social. Pero si estás en un momento de tu vida en el que se te está resistiendo el asunto un poco más de la cuenta, quizás debas revisar tu forma de abordarlo.
¿Qué hay que hacer para tener amigos?
“Cuando somos pequeños, establecemos amistades con personas con las que pasamos mucho tiempo, ya sea en el colegio, en el vecindario o en alguna actividad o deporte. Pasar tanto tiempo juntos estrecha los vínculos y crea una intimidad y confianza cada vez mayor”, explica Elena Cerezo, psicóloga y terapeuta de El Prado Psicólogos en Madrid. A medida que vamos creciendo, estas circunstancias cambian y hay que dedicarle más tiempo y esfuerzo a las amistades. “Además, las oportunidades para consolidar una nueva amistad quizá no aparezcan de una manera tan orgánica y natural. A lo mejor las personas con las que nos gustaría estrechar lazos, las hemos conocido en un contexto que no favorece a este objetivo”. Y esto requiere que demos un paso adelante a la hora de proponer planes adicionales. No todo el mundo tiene la misma facilidad para hacer amigos. Pero no esperes a que sea algo que simplemente llegue.
“Provoca oportunidades para interactuar con personas que compartan tus mismos intereses, gustos o necesidades”, aconseja Cerezo. Lo más normal es que al principio te resulte forzado o artificial. “En todo tipo de relaciones te sentirás más cómodo a medida que la relación vaya avanzando y la confianza aumente”. Pero algo por lo que tienes que empezar es por la frecuencia. “Cuanto más salimos y socializamos, más se repetirán esos encuentros y más posibilidades tendremos de crear un punto afectivo”, añade el psicólogo Bernardo Stamateas. Parece simple, pero si no nos exponemos a ello, es imposible que ocurra por arte de magia. Otro tema clave es la empatía y reciprocidad. Debe ser una relación simétrica donde uno no se pone por encima, sino al lado del otro. A partir de ahí y buscando cosas que tengáis en común, será más sencillo crear una amistad porque tendrá cimientos más sólidos.
¿Por qué se me hace difícil tener amistades?
Si encuentras que el hecho de hacer amigos o de mantenerlos siempre ha sido algo difícil para ti, es posible que haya aspectos más básicos del funcionamiento social que necesites trabajar. Si eres tímido, introvertido o incluso tienes fobia social, hacer amigos puede producirte una gran incomodidad “y lo más probable es que evites cualquier tipo de situación que requiera interactuar con otros”, explica Cerezo. La experta cuenta que desde el área de la psicología que estudia el apego, se han etiquetado las llamadas sensibilidades especiales. “Estas sensibilidades definen disfuncionalidades que suelen provenir de nuestros aprendizajes y de las relaciones con nuestros cuidadores y pueden ayudarnos a entender qué está sucediendo en la base de las dificultades para relacionarnos”. La buena noticia es que podemos aprender a relacionarnos con nuestros propios patrones.
“Aquellos con sensibilidad a la separación tienden a establecer relaciones de gran dependencia por un fuerte temor a ser abandonados”. Y esta dinámica puede provocar el rechazo de los demás, ya que se ven ahogados por la relación. Si es tu caso, debes ser consciente de que puedes funcionar de manera autónoma y que las relaciones adultas necesitan independencia. “Si tienes alta sensibilidad a la estima, tiendes a experimentar un malestar ante las críticas o cualquier situación en la que pienses que te pones en evidencia”. Por eso, lo mejor es interiorizar que tu valor no está en lo que haces o tienes, sino en lo que eres. “Con la sensibilidad a la seguridad ocurre que desarrollamos fuertes barreras de defensa para que no nos invadan”. Y por eso debemos encontrar un equilibrio entre permitir que los demás entren en nuestra vida y establecer límites cuando lo necesitemos, explica Cerezo.
¿Cómo hacer amigos si eres tímido?
Como apunta la Dra. Marian Rojas Estapé, “la timidez nace de una falta de seguridad en uno mismo y de la sensación de que uno no merece la atención o el reconocimiento de los demás”. Pero cuando esa timidez se agudiza, puede llegar a transformarse en el trastorno de personalidad por evitación. Si es tu caso, eres extremadamente tímido y no sabes cómo hacer amigos, la experta en psiquiatría recomienda empezar poco a poco. “Apunta 10 situaciones concretas que para ti sean de estrés o riesgo y cuando las tengas definidas, ponte una pauta para ir enfrentándote a ellas”.
Por ejemplo, si te invitan a un plan en el que vas a tener que hablar y ser en algún momento el centro de atención, un truco es llevar temas de conversación preparados. “No hay nada mejor que prepararse las escenas donde uno sabe que va a sufrir”. Algo también fundamental es respirar antes de hablar. “Cuando tienes timidez, se activan los síntomas de ansiedad, angustia, depresión”. Pero cuando preparas la respiración y los temas, es más difícil que eso ocurra. Otro tip es pensar en alguien cercano que sea tímido. “Imagina qué le dirías a esa persona, porque muchas veces viéndolo desde otra perspectiva, es más fácil lidiar con la situación”, aconseja Rojas.
Por otro lado, Natasha Daniels, terapeuta especializada en ansiedad, recomienda acercarse a los demás empezando por buscar a la persona que más coincida contigo a nivel de personalidad. Por ejemplo, a alguien que también parezca tímido. Después, será importante romper el hielo con algo de small talk. Pero sobre todo devolver la conversación para que no parezca un monólogo. Es decir, si te sientes incómodo, haz tú las mismas preguntas, como si jugaras al tenis. Así, si te abruma, siempre puedes “pasar la pelota”.
¿Cómo hacer amigos a los 20?
En la adolescencia era sencillo hacer amigos, pero conforme vamos creciendo y teniendo nuevas responsabilidades, resulta mucho más complicado empezar a construir amistades desde cero. “En muchas ocasiones nos quedamos quietos esperando a que esa amistad llegue porque nos vendieron la idea de que todo tiene que darse de manera espontánea, sin poner nada de nuestra parte”, explica María Paula, psicóloga clínica. Por eso, los consejos que nos da empiezan por salir de la temidísima zona de confort. “Si estás todo el tiempo en tu casa o en los entornos que sueles frecuentar, no te expones a nuevos lugares y contextos”, dice la experta.“Mantén la mente abierta y no te limites a un tipo de persona”. Es muy valioso conocer gente que piensa diferente, que cuestiona lo que tú piensas y que pueda crear debates sanos.
Por otro lado, “permítete ser tú mismo, no finjas ser otra persona ni intentes adaptar tus manías o tu forma de hablar a los demás”. Esto es fundamental a cualquier edad de nuestra vida. También, como han comentado el resto de psicólogos, hay que ser proactivos. “No esperes a que sean los demás quienes den ese primer paso. Tú también puedes hacerlo. Invita a un café, inclúyete en la conversación, haz una pregunta, no des por hecho que esas personas tal vez en algún momento se acerquen a ti”. Y de la misma forma que muestras interés, también sé paciente. “Una amistad no se construye de la noche a la mañana”. Ni tampoco todos los amigos son iguales. Hay personas con las que puedes compartir secretos y otras con las que sales de fiesta y te lo pasas bien. Lo importante es que todas forman parte de tu red de apoyo.
¿Cómo hacer amigos nuevos a los 30?
Noelia Labrandero, psicóloga de Somos Estupendas, también aborda el tema del paso del tiempo. “Las amistades van cambiando en función del momento evolutivo en el que estamos”. A los 20 no tenemos los mismos intereses que a los 30. Evolucionamos como personas y aunque siempre está bien mantener las amistades, en esta etapa también es importante entender que más vale calidad que cantidad. Con la treintena empezamos a sentir “una especie de miedo, vergüenza y pereza por conocer gente”. Pero, como explica Labrandero, “una de las claves para hacer amigos a los 30 es tener iniciativa y perder la vergüenza”. Ya no nos vale con decir “a ver si quedamos pronto”. Hay que concretar, establecer fechas y mostrar un interés activo. Todo el mundo está “demasiado ocupado” y cuadrar el Calendar parece misión imposible. Por eso, si de verdad quieres hacer amigos y mantenerlos, ¡agenda citas!
“Otro de los tips es conocer tus intereses y gustos”. Por ejemplo, si no estás en la onda de tus amigos (que se casan y tienen hijos), es normal que prefieras quedar con otras personas. “Pero si no sabes cuáles son tus metas actuales, vas a caer muchas veces en situaciones en las que dices ‘qué hago yo aquí’ y te sentirás completamente fuera de lugar”. A esta edad “tendemos a comprarnos todo el tiempo y lo que tienes que ver es hacia dónde va tu proyecto vital”. Es muy fácil quedarnos en casa pensando que nos apetece peli y manta cuando realmente es una excusa para no afrontar la situación. “Lo disfrazamos de pereza, pero puede ser miedo al rechazo o a no encajar”. Por eso, algo fundamental para hacer amigos a los 30 es perder esos miedos y lanzarnos a conocer gente que comparta nuestro mood de vida (personal o profesional).
¿Cómo hacer amigos a los 40?
La psicóloga Elvecia Trigo cuenta que, a los 40, uno de los mejores lugares para hacer amigos sigue siendo el trabajo, pero lo que de verdad recomienda es buscar aficiones fuera de casa. Y sobre todo reflexionar sobre lo que nos pasa con la soledad. “A veces no es que no consigas hacer amigos, es que no estás abierto a conocer gente. Si lo que buscas en la otra persona es que llene un vacío, realmente estás perdido. Esa soledad primero tienes que llenarla tú mismo”. De ahí que aconseje apuntarse a planes que giren en torno a nuevos hobbies. Un taller de pintura, un showcooking, una ruta de senderismo. Piensa qué te gusta e intenta convertir esa experiencia en algo que te permita conectar con otras personas. Por supuesto, viajar también es ideal. Si tienes salud, recursos y mente abierta, hay incluso road trips que puedes hacer en grupo.
Por otro lado, el Dr. Orion Taraban, explica que “la manera de hacer amigos siendo adulto es inscribirse en programas de certificación. Puede ser cualquier cosa, siempre y cuando esté conectada con alguna forma de logro”. El experto cuenta que la forma más rápida de construir relaciones es someterse a una prueba compartida, que une a las personas haciendo que se apoyen unas a otras. “Necesitas pasar tiempo con la otra persona. Y el vínculo masculino a menudo requiere al menos el pretexto de un reto común”. Así que, ya sabes. Tengas la edad que tengas, coge al toro por los cuernos porque nunca es tarde para hacer amigos.
