El amarillo brilla con fuerza este invierno. De total looks a accesorios y calzado, esta vibrante tendencia monocromática ilumina las pasarelas y las calles. Desde el optimista limón al sutil pastel o el atrevido pajizo.
El amarillo en la moda de hombre siempre ha generado mucha controversia. Con la misma intensidad lo aman o lo odian. Pero es incuestionable que este color suscita opiniones como quiera que se vista. Al igual que los demás colores de la paleta, el amarillo tiene connotaciones tan buenas como malas. Si el verde representa al mismo tiempo la naturaleza y la envidia, el amarillo es el color del optimismo, pero también de la cobardía o el modernismo. Su brillo sugiere alegría y calidez, mientras que su proximidad al dorado aporta un soplo de abundancia. También se ha considerado el color de la enfermedad y el envejecimiento, el tono nervioso de la ansiedad, su potencial energético contrarrestado por algo más inquietante.
Si en el teatro el color amarillo está más que prohibido por estar asociado con la mala suerte, en el mundo de la moda lo reciben con los brazos abiertos para teñir los outfits más invernales de la temporada.
Y es que los diseñadores parecen haberse quedado deslumbrados por la calidad de la luz que desprende, pues lo hemos visto prácticamente en todas sus tonalidades: amarillo dorado, amarillo limón, amarillo azufre…
Recientemente, el amarillo se ha convertido en un color más informal y accesible. Los desfiles de hombre de la temporada otoño/invierno 2023 estuvieron repletos de amarillo, en tonos que iban desde la limonada nublada a los girasoles de Van Gogh.
JW Anderson
El desfile de JW Anderson hizo alarde de la incuestionable creatividad del diseñador y se tomó muy a pecho la idea de la libertad con una propuesta repleta de texturas. Su desfile se centró en un aspecto fundamental de toda su obra -la naturaleza aparentemente arbitraria del uniforme que nos imponen las normas sociales de género creadas hace tiempo- retomando una de sus declaraciones más transgresoras. Sus shorts, faldas y minivestidos con texturas y volantes -todos ellos llevados por hombres- provocaron la exaltación de los asistentes.
Dior
Kim Jones modernizó los looks deportivos con asimetrías y tonos fríos en su colección otoño-invierno 2023-24 y fue ahí, sobre la pasarela, donde volvió a brillar el amarillo. Con prendas de aspecto técnico e inspiración deportiva, Dior apostó por siluetas más ligeras, holgadas y modernas donde destacaron tres looks amarillos sobre la sobriedad del resto de la colección.
Gucci
En el desfile de Gucci, el amarillo resultó tan desbordante como sobrio. Y no es para menos. Según el comunicado de prensa, la colección de otoño/invierno 2023 de la casa italiana fue “un reflejo de las individualidades representadas por los polifacéticos creativos y artesanos que habitan la casa Gucci». Puede que, en realidad, se tratase de un esfuerzo colectivo por sacar la colección adelante tras la salida del director creativo de la firma, Alessandro Michele. Y ahí estaba el amarillo para salir al rescate de las ideas improvisadas de una marca que sigue reponiéndose de los contratiempos que parecen estar arraigados en su ADN.
Charles Jeffrey Loverboy
La alegría del amarillo también hizo acto de presencia en el desfile de Charles Jeffrey Loverboy. Inspirado por la cultura escocesa su colección Otoño-Invierno 2023 también hizo un hueco al entusiasmo de este color tan vibrante.
The Basic Scottish fue el título de la colección F/W 23 de Charles Jeffrey Loverboy, y en ella retomó los elementos de la cultura de las tierras escocesas para transformarlos en toda una referencia del estilismo queer de su marca donde un traje amarillo destacó por encima del resto de los looks de colores más neutros.
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