¿Alguna vez te has preguntado por qué has aumentado un par de kilos en pocas horas? Tranquilo, te contamos por qué ocurre esto
La grasa no lo es todo, existen muchos factores que son los culpables de alterar tu peso cada día. Los carbohidratos, la fuente de energía de nuestro cuerpo, además de aportarnos dinamismo también puede hacer que retengamos líquidos y pesemos un poco más. ¿Estás cansado de hacer dietas, acudir regularmente al gimnasio y que cuando te peses la báscula te de un mal rato? No te preocupes, te mostramos cuáles son las razones por las que tu peso varía de un día a otro.
¿Por qué varía nuestro peso cada día?
Que nuestro peso cambie de un día para otro, o incluso si nos pesamos por la mañana o por la noche, puede deberse a diferentes factores. Te contamos algunos de los más comunes.
LA INGESTA DE CARBOHIDRATOS
Si comes alimentos que no tengan muchos hidratos de carbono, nuestro cuerpo los descompondrá en glucosa o azúcares, más tarde, los utilizarán las células para producir energía para el cuerpo.
Sin embargo, si por el contrario la ingesta fue alta, tu cuerpo va a querer reservarlos para utilizarlos más adelante, por ejemplo, cuando se pase un tiempo sin comer este tipo de alimentos. Al almacenarlos, nuestro organismo los transforma en glucógeno, y cada gramo tiende a retener entre tres o cuatro gramos de agua.
Por tanto, si llevamos a cabo una alimentación muy rica en hidratos de carbono y tomamos en exceso, nuestro cuerpo puede retener líquidos para intentar almacenar el sobrante, de esta forma si nos pesamos en la báscula veremos que habremos aumentado el peso. Pero no hay que preocuparse, no es grasa, es solo agua, que más tarde desaparecerá.
La otra cara de la moneda la explica el doctor Sebastián La Rosa, profesor en medicina. Se trata de la pérdida de peso en pocos días, esto se debe al ejercicio que llevemos a cabo. Al practicar deporte, si hemos llevado a cabo ayuno, las reservas de glucógeno que tenemos se agotan y, por tanto, perdemos la retención de líquidos. Esto también causa cambios que no son reales, puesto que perdemos peso rápido (por la falta de ese líquido producido por el glucógeno) y disminuye el volumen de nuestros músculos (el sitio donde se almacenaba el líquido). No te preocupes, en cuanto recuperes las reservas de glucógeno recuperarás el volumen que tenías antes.
TOMAR SAL EN EXCESO
El sodio producido por la ingesta de sal puede provocar que nuestro cuerpo retenga líquidos, lo que significa que su volumen sea mayor. Esta agua extra que se almacena en nuestro organismo, ya sea en un musculo o en el abdomen, hace que, a la hora de pesarte en una báscula, ésta marque más. Aunque lo que realmente hace que peses más son esos líquidos y no el aumento de grasas. Esta retención de líquidos no es permanente, por lo que pasado un tiempo se eliminan.
USO DE DIURÉTICOS
Se trata de medicamentos que provocan que los riñones produzcan más orina, por tanto, contribuyen a la eliminación del líquido y la sal que sobra de nuestro organismo. La expulsión de estos fluidos sobrantes provoca que dé la sensación que ue hayas adelgazado porque en la báscula aparece que has perdido peso, sin embargo, al tratarse de una solución a corto plazo, ese peso eliminado volverá al cuerpo una vez hayas recuperado el líquido.
LA DESHIDRATACIÓN
Como hemos venido explicando a lo largo del artículo, el agua juega un papel fundamental en la variación de nuestro peso. A lo largo del día, las personas se pueden deshidratar por la orina o el sudor. Por lo que es muy importante mantener los niveles correctos de líquidos en el organismo. Cuanto menos hidratado te encuentres, más te va a engañar la báscula cuando te subas en ella.
NIVELES ALTOS DE ESTRÓGENO
Durante el ciclo menstrual, las mujeres sufren cambios hormonales que influyen en la retención de líquidos y en la hinchazón del abdomen, por lo que el peso es mayor en los primeros días del ciclo menstrual. Sin embargo, esto no significa que no afecte también a los hombres, ya que una de las razones de que esto se produzca son los altos niveles de estrógeno, algo que también puede producirse en hombres, provocando retención de líquidos en el cuerpo masculino.
EL CONSUMO DE ALCOHOL
¿A quién no le apetece beberse unas cañas con familiares o salir de copas con amigos? Si se hace de manera prudente y sin excederse puede no tener demasiadas consecuencias negativas. En cambio, el consumo reiterado de alcohol puede provocar que se reduzca el ritmo de la digestión, que se retengan líquidos y la ingesta de calorías vacías que no aportan nutrientes a nuestro organismo.
LA DIETA
No hablamos de una dieta para perder o ganar peso, sino una dieta que contenga alimentos que se digieran lentamente, como por ejemplo algunos lácteos o proteína animal. Estos alimentos se acumulan en nuestro sistema digestivo y afectan de manera negativa a nuestro peso. Por ejemplo, si realizaste una barbacoa el fin de semana y comiste mucha carne asada, cuando te peses a principios de la siguiente semana tu báscula marcará más de lo que debería y no por eso significa que hayas engordado un par de kilos en 2 días.
Algunas investigaciones han demostrado que el peso de las personas no solo varía de un día para otro, sino que se ve afectado si nos pesamos entre semana o los fines de semana. Durante nuestros días de ocio, normalmente sábados y domingos, las actividades que llevamos a cabo impactan negativamente en la salud provocando retención de fluidos. Por este motivo, nuestro peso es mayor un domingo por la noche y es menor un viernes por la mañana.
¿Cuándo es el mejor momento para pesarse?
¿Existe un momento del día ideal para pesarse?, no exactamente, pero algunos expertos recomiendan hacerlo en ayunas por la mañana y desnudo, de esta forma la ropa no influirá en el resultado. Además, se aconseja hacerlo una vez a la semana y siempre en las mismas condiciones.
La retención de líquidos o la disminución de las reservas de glucógeno no son un efecto permanente, por lo que no hay que alarmarse ante estas variaciones de varios kilos en pocos días, siempre y cuando no notemos que afectan a nuestra salud, que en ese caso lo mejor es acudir a un especialista. Ante esto, Paloma Quintana, dietista y nutricionista especializada en composición corporal, recomienda “no fiarse del número que aparece en la báscula cuando nos subimos en ella, ya que el peso puede ganarse en pocos días si se ha comido más carbohidratos o más sal de la normal”.
La pérdida de masa muscular por la falta de ejercicio puede desencadenar adelgazamiento, a pesar de que la grasa corporal sea la misma. “Medirte el contorno de la cintura con una cinta métrica es una técnica muy eficiente para saber si has adelgazado o engordado”, comenta Quintana. De esta forma no te obsesionas si un día pesas más o menos que el anterior.
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