Si quieres saber cómo dejar de sudar tanto, estos remedios caseros te pueden sacar de un apuro.
El exceso de sudoración, también conocido como hiperhidrosis, afecta aproximadamente al 5% de los hombres en todo el mundo. Esta afección, que suele aparecer en la cabeza y en las palmas de las manos, es un problema particularmente incómodo durante los meses de verano que va más allá del mal olor que produce el exceso de sudor.
Aunque la hiperhidrosis no representa un riesgo para la salud, su impacto a nivel social y emocional es evidente. Los hombres que padecen exceso de sudoración a menudo enfrentan desafíos diarios, desde el simple acto de dar un apretón de manos hasta mantener una apariencia fresca y profesional en situaciones sociales y laborales… por no hablar de una cita romántica.
Si quieres saber cómo dejar de sudar tanto, presta atención a las soluciones propuestas por el Dr. Guillermo Llopis, de la Clínica Ferraro. El Dr. Ferraro comparte con nosotros cuáles son los mejores consejos para que los hombres puedan manejar y reducir el exceso de sudoración, mejorando así su calidad de vida y la confianza en sí mismos.
¿Por qué sudo tanto?
Si el exceso de sudor se presenta mientras estamos haciendo cosas cotidianas que no requieren un esfuerzo físico excesivo, como puede ser dar un paseo a la sombra, leer o ver la televisión, lo más seguro es que se trate de un caso de hiperhidrosis común.
Las causas de la híperhidrósis son múltiples y no hay un solo factor que explique el exceso de sudor. Tal y como nos cuenta el Dr. Llopis, en el problema del exceso de sudoración influyen tanto causas genéticas, como una alteración del sistema nervioso autónomo así como factores hormonales. También suele deberse a una afectación por patologías médicas, como puede ser la diabetes o una alteración hormonal como es el tiroides.
“Otra de las causas principales de la hiperhidrosis son los fármacos como los antidepresivos o aquellos destinados a la tensión arterial, así como los que sirven para los ejes hormonales, como las terapias hormonales sustitutivas”, expresa el doctor Llopis.
El problema de la hiperhidrosis afecta prácticamente por igual a hombres que a mujeres, sin ninguna distinción significativa, y puede aparecer a cualquier edad, aunque es más común en adolescentes y adultos jóvenes. En el caso de Clínica Ferraro, puntualizan que la mayoría de los pacientes que acuden con este problema es debido a que la sudoración excesiva les genera incomodidad, vergüenza y les afecta tanto en sus relaciones sociales, como laborales.
¿Cómo hacer para dejar de sudar tanto?
Haz deporte de alta intensidad
Te puede sonar contradictorio pero el remedio casero que mejor funciona para controlar el exceso de sudor es realizar deportes de alta intensidad, desde crossfit, salir a correr o hiit. Durante el ejercicio físico sudarás muchísimo, sí, pero el resto del día tu cuerpo ya habrá equilibrado tus niveles hormonales y notarás un descenso significativo de la intensidad de la sudoración.
Mantén una dieta saludable:
La dieta es uno de los aspectos más importantes para aquellas personas que sufren exceso de sudoración. Evita los alimentos picantes, la cafeína y, sobre todo, el alcohol, ya que estos alimentos incrementan considerablemente la sudoración. Lo más importante es que estés muy bien hidratado para regular tu temperatura corporal.
Otro aspecto muy importante para dejar de sudar tanto es hacer digestiones ligeras. Durante los meses de verano, en los que el exceso de sudor se activa a la mínima de cambio, no hagas comidas y cenas muy pesadas. Opta por dietas ligeras para facilitarle a tu cuerpo la tarea de la digestión.
Antes de cualquier encuentro, lávate bien la cara y las manos con agua muy fría
Si has quedado con alguien, tienes una reunión de trabajo, una cita romántica o has quedado con tus amigos para comer, vete al cuarto de baño directo y lávate bien las manos, la cara y la nuca con agua muy fría ¡congelada! Después, con una toalla sécate bien, haciendo especial hincapié en la parte del rostro que empieza antes empiezan a sudar: la frente por la parte de las entradas, las patillas y nuca. Es en esas partes del rostro donde se encuentran las glándulas sudoríparas, así controlarás que empiece a brotar el sudor a lo loco.
Elige el antitranspirante adecuado:
Utiliza un antitranspirante con una alta concentración de cloruro de aluminio. Aplica antes de dormir para que sea más efectivo, ya que tus glándulas sudoríparas están menos activas durante la noche.
Mantén una higiene personal rigurosa:
Cuando vayas a ducharte, usa jabones antibacterianos para reducir la proliferación de bacterias que causan el mal olor. Seca bien tu piel, especialmente en las áreas propensas a sudar como la cabeza, las axilas, las palmas de las manos y la espalda.
Vístete con ropa fresca:
Un aspecto básico para dejar de sudar tanto es vestirte con ropa de lino, algodón y otros tejidos transpirables y fresquitos. Sobre todo, evita materiales sintéticos que atrapan el calor y la humedad.
Tratamientos médicos:
Consulta a un dermatólogo para explorar opciones como la iontoforesis, donde se usa una corriente eléctrica suave para reducir la actividad de las glándulas sudoríparas, o las inyecciones de toxina botulínica (Botox) que bloquean temporalmente los nervios que causan sudoración.
Medicamentos anticolinérgicos:
En algunos casos, los médicos pueden recetar medicamentos que reducen la actividad de las glándulas sudoríparas. Es importante seguir las indicaciones médicas debido a los posibles efectos secundarios.
Utiliza polvos absorbentes:
Aplica polvos de talco o especiales para controlar la humedad en áreas propensas a la sudoración, como las axilas, las manos y los pies.
Desodorantes naturales y bicarbonato de sodio:
Algunos desodorantes naturales pueden ayudar a controlar el sudor. El bicarbonato de sodio también puede ser útil para mantener las axilas secas.
Los mejores tratamientos médicos para controlar el exceso de sudor
Existen diferentes formas para controlar el exceso de sudor, tanto de la cabeza como del resto del cuerpo (manos, axilas, espalda…). Como especifican en la Clínica Ferraro, más allá de los tratamientos más tradicionales (una buena higiene, utilizar ropas que ayuden a transpirar, utilizar desodorantes y cremas que ayuden a esa transpiración…) actualmente existen soluciones más eficaces para controlar el sudor excesivo.
“Lo cierto es que las soluciones tradicionales suelen quedarse cortas y es entonces cuando hay que recurrir a otros tratamientos como son los neuromoduladores o, incluso, el uso de un dispositivo láser como el Endolift o el lipoláser» comenta el doctor Guillermo Llopis.
Cirugía para curar el exceso de sudor
Tal y como explica el Dr. Llopis, en casos muy extremos se puede hacer una intervención quirúrgica, que consiste en una denervación de las fibras nerviosas del sistema nervioso autónomo que está afecto. Lo más común es realizar tratamientos más conservadores, como el uso de neuromoduladores y luego utilizar unos tratamientos algo más invasivos, como es el láser. Generalmente, en el caso de los neuromoduladores, se requiere que se hagan cada cierto tiempo retoques ya que el efecto va desapareciendo, aunque hay casos en los que, con una sola aplicación, se soluciona el problema durante los meses de verano.
Tratamiento láser para curar la hiperhidrosis
El láser es el tratamientos más efectivo, ya que ataca el problema de raíz destruyendo el folículo, la parte de las glándulas que están afectadas y al destruirlas no generan más sudoración.
Por lo general, los pacientes suelen realizarse este tipo de tratamientos en aquellas épocas de más calor, porque es cuando notan más la sudoración. Es decir, a partir de mayo es cuando aumentan este tipo de intervenciones.
Sobre cuál es mejor para cada caso, es importante destacar que hay que individualizar a cada uno de los pacientes, ya que pueden tener diferentes necesidades. Esto dependerá, también, de si se quieren obtener unos resultados definitivos o únicamente puntuales. Lo que sí es necesario tener en cuenta es que, a pesar de que estos tratamientos no necesiten de ningún tipo de recuperación a posteriori, sí es importante atender a ciertas pautas, como evitar saunas, piscinas o jacuzzis durante las primeras 24-48 horas, en el caso de los neuromoduladores, y unos cuantos días más, en el caso de los tratamientos con láser.
