El cárdigan es una de las prendas estrella del guardarropa masculino y conjuntarlo verdaderamente bien dependerá de la ocasión, pero sobre todo de la estética que quieras conseguir. ¡Fíjate en estos looks!
El cárdigan, igual que el chaleco de punto, es la prenda del otoño-invierno por antonomasia, sobre todo si eres un enamorado del layering y te encanta vestir con capas siempre que el tiempo acompañe. Es una pieza versátil y perfecta para mejorar cualquier outfit. Y ojo, no la confundas con ropa para tíos serios, old-fashioned o demasiado vintage. Esta “rebequita” es ideal para looks smart-casual, pero también para el día a día, conjuntos cosmopolitas o para el street style más irreverente. Tiene posibilidades casi infinitas, te la puedes poner con todo y además completa outfits que a priori parecen inacabados. Y ahora sí que sí, ¡te contamos cómo sacarle partido!
Utiliza el cárdigan para mezclar texturas y estilos
Existe un cárdigan especial para cada hombre y lo mejor de todo es que puedes experimentar y combinar el tuyo, según seas más formal, atrevido o tradicional a la hora de vestir. Los looks que puedes conseguir son tan diferentes que esta prenda cobra un protagonismo sin igual. Si eres de los que siempre lleva pantalones anchos, cargo o de corte más loose, un cárdigan texturizado puede ser la solución perfecta para contrarrestar ese estilo más urbano y hacerlo más creativo. Además, siempre nos puede salvar de un apuro cuando no sabes cómo vestir con 15 grados o menos (y ahí el cárdigan de punto mullido con lana es perfecto). Con cuello de pico, botones y puños y bajo con un ligero canalé, convierte su silueta amplia en la opción ideal para combinar texturas y tejidos en un único conjunto que te funcionará genial para el día a día.
Consigue el look más posh con tu cárdigan beige de punto
Este es probablemente el estilo de cárdigan que todos tenemos en mente. La clásica pieza de algodón en tonos claros que combina genial con unos pantalones blancos y que hace que el outfit se vea muchísimo más elegante. Con los acabados en rib aporta unos detalles especialmente atractivos y es sin duda el look ideal para cualquier ocasión. A la oficina, a una cita, al cine o a pasear. No importa. Ah y si eres más de vestir con tonos oscuros, no te preocupes. Funciona igual de bien con negros, grises, tostados o marrones más apagados. Si es liso, más formal. Si tiene estampados, más divertido. Ahí, la decisión es tuya.
Ponte el cárdigan a modo de americana azul
El culmen de la tendencia grandpacore para hombres es precisamente este tipo de looks: cárdigan con cuello smoking que combina con pantalones de traje, zapatos de vestir o botines formales y camisa debajo. Perfecto para los días fríos en la ofi o variar un poco entre tanto traje otoñal. Ten en cuenta que cuanto más denso el tejido, más serio puede parecer y si es acanalado con líneas verticales, además también ayudará a estilizar la zona del abdomen. Si te decantas por el azul marino, lo podrás llevar como sustituto de tu blazer y además tendrás un aporte extra de abrigo que siempre se agradece cuando bajan las temperaturas.
Combínalo con un toque preppy
Si quieres ir un paso más allá, este cárdigan con estructura de punto Aran es lo que necesitas para pasarte al lado “universitario”. El rollito es muy característico del Professor Style, o sea que para quitarle hierro al asunto e ir más juvenil, lo mejor es combinarlo con tus jeans favoritos, camisa y corbata (opcional) a juego. Aquí, los accesorios también son ultra importantes, o sea que intenta que tu reloj, cinturón y calzado hagan match. Y a partir de ahí juega con los colores (más neutros o chillones) y las texturas (más sencillas o extravagantes). Eso sí, si quieres el look preppy “de toda la vida”, solo tendrás que tomar como referencia outfits como este de Polo Ralph Lauren para bordarlo a la primera.
El cárdigan también puede ser perfecto para looks sport
Y como ya te hemos avisado, no te dejes engañar por esta prenda y su rollo un poco retro. El cárdigan también combina genial con opciones mucho más deportivas e informales, o sea que si eres de esos hombres que visten sport, esta será tu versión. Para empezar, apuesta por la cremallera, es más casual que los botones. Si eliges el algodón fino, será ideal para el entretiempo y uno más grueso, perfecto para el invierno. En cuanto al corte, te recomendamos irte al normal, ni muy ceñido ni muy holgado, para mantener la estética a raya. Recuerda que el verde es el color más top del momento y pega genial con grises, azules y marrones, o sea que si te apetece aventurarte con estos tonos, además de bien vestido, seguirás las tendencias. Ah y si te pones unas green sneakers con este outfit, lo clavas del todo.
Cárdigan estilo bomber para equilibrar looks elegantes
Aquí nos vamos a ir al outfit contrario. Si las capas intermedias son elegantes y minimalistas, vamos a compensar esa estética visual con un cárdigan de antelina con un matiz más holgado. Quizás podemos jugar con otros colores o bien hacer un total look completamente negro. Si quieres destacar algún tipo de prenda por encima de las demás, elige la primera opción. El conjunto se verá súper sencillo, pero a la vez lujoso y muy bien contrastado. Si te apetece probar la versión más chic, apuesta por el cuello alto y los pantalones de pinzas anchos. O si buscas algo más simple, ponte un suéter clásico con cuello redondo debajo y unos pantalones slim y no tendrás que darle muchas más vueltas.
Cárdigans especiales para looks semiformales
Si te gustan los looks diferentes, únicos y que llamen especialmente la atención, aquí los cárdigans con dibujos en jacquard son perfectos. El cuello smoking lo hará más formal, pero el estampado conseguirá ese punto medio perfecto para combinarlo con una gama de tonos otoñales que no dejará a nadie indiferente. En principio, puedes ir muy “discreto” en las capas intermedias e interiores, porque aquí el gran protagonista es el cárdigan. Por eso, no satures el resto del outfit con miles de complementos, joyas o accesorios innecesarios. Es mejor dejar que esta prenda haga su papel sin mayores interferencias.
Cárdigan acanalado negro para un outfit minimalista
Una opción que podría llevar perfectamente el mismísimo Kendall Roy y que es perfecta por lo minimal que resulta. Es la definición ideal de que “menos es más” y de que el lujo silencioso también se escucha, se ve y se aprecia a kilómetros. Este cárdigan, de lana y cashmere, es suave y tiene detalles acanalados. Está diseñado para un fit un pelín más holgado y su mayor plus es que incorpora directamente el cuello alto. Por eso, si algún día no sabes qué ponerte, este tipo de outfits es la solución más atemporal, versátil y práctica de todas. Y no te fallará nunca, créeme.
Con pantalones oversize suaviza el conjunto
Cuando un hombre lleva un conjunto muy oversize, es interesante combinarlo con un cárdigan ajustado para compensar la parte del bottom con la del top. En este caso, nos vamos a por la clásica opción que nos recuerda al polo o a las camisas de bolos en versión abotonada. Aquí, no te olvides de dejar el último botón sin abrochar, que es más trendy. Y a nivel de colores, intenta innovar un poco. O bien a través de los patrones o bien mediante tonos más vivos. Un truquito que también queda genial es irte a por los colores fríos en su totalidad o a por los cálidos. Así, además, puedes ver qué paleta te queda mejor y hacer que las prendas te favorezcan el doble.
Logomanía al poder y pantalones llamativos
Ahora, si lo que queremos es irnos a por la marca, los logos y la extravagancia, haz que tanto la parte de arriba como la de abajo se potencien entre sí. Si tu cárdigan tiene tonos apagados, compénsalo con unos pantalones más estridentes. Así el look tendrá más fuerza visual y no te quedarás con el típico conjunto “un poco de abuelo”, sino todo lo contrario. Además, la clave está en lucir las prendas al 100% con un outfit que no pase desapercibido, o sea que no tengas ninguna vergüenza y hazlo con actitud. Porque realmente, combinar un cárdigan no es para nada complicado (y menos con estas ideas de inspo), así que únicamente piensa en qué tipo de hombre quieres ser a la hora de vestir y ve a por todas en esa dirección.
