Todo lo que ellas valoran en un hombre, contado sin filtros y con respuestas reales.
Nos pasamos la vida intentando descifrar qué les atrae, qué buscan, qué valoran… ¡qué sienten, qué piensan! y, sobre todo, qué es lo que más les gusta a las mujeres de los hombres. Así que decidimos dejar de suponer y preguntarles directamente. Hicimos una encuesta anónima a más de 350 mujeres de entre 25 y 45 años para saber qué es lo que más les gusta a las mujeres de los hombres. Y esto es lo que nos dijeron.
¿Qué es lo primero en lo que se fijan las mujeres?
La mayoría coincidió en que no es el físico lo que llama más la atención al principio, sino la actitud. “Me fijo en cómo entra en un sitio, cómo se mueve, si transmite seguridad o va pidiendo permiso con la mirada”.
Aunque el físico aparece en varias respuestas (mención especial a los brazos, el cuello, las manos, la voz o incluso el culo), la mayoría de las mujeres va más allá de la apariencia. Lo primero que miran no siempre se ve. La forma de hablar, los temas de conversación, la educación, la manera en que trata a su entorno o cómo habla de sus amigos y seres queridos, pesan más de lo que muchos imaginan.
Cuando les preguntamos qué es lo que más valoran en un hombre al conocerlo, el 58% de las respuestas de nuestra encuesta señalaron la actitud como lo más atractivo en un primer contacto. Le siguen de cerca el sentido del humor, con un 33%, y en menor medida, la inteligencia, que fue mencionada por un 17%. Esto confirma que la forma en que un hombre se comporta y se relaciona con el entorno tiene un impacto mucho mayor que cualquier prenda o rasgo físico. El estilo también cuenta, pero no en términos de ropa cara o marcas. “Puedes llevar vaqueros y una camiseta blanca, pero si sabes cómo hacerlo, eso dice mucho de ti”.
¿Importa el físico tanto como creemos?
Definitivamente SÍ, pero no tanto como solemos pensar. Solo una de las encuestadas respondió que el físico le importa muchísimo, mientras que un 50% dijo que le importa bastante, y un 42% lo valoró como algo importante, pero no determinante. Ninguna lo calificó como irrelevante, pero quedó claro que la atracción física es solo una parte del todo.
“Obviamente tiene que haber un mínimo de atracción, pero si luego abre la boca y no hay nada, se cae todo”
Shakira
Así es que como dijo Shakira, mucho gimnasio, pero trabaja el cerebro también. Cuidar tu cuerpo está bien, pero no es lo que te va a hacer inolvidable.
¿Qué estilo masculino resulta más atractivo?
Aquí hubo más diversidad, pero también una clara tendencia, el estilo casual gana por goleada. El 67% de las mujeres encuestadas eligió esta forma de vestir como la más atractiva. En segundo lugar quedó el estilo urbano o alternativo con un 25%, mientras que solo un 8% optó por un look más clásico.
Lo que se repite en todas las respuestas es la importancia de la coherencia: que el estilo encaje con la personalidad y que se note que hay intención, no disfraz. No se trata de tener un armario de diseñador, sino de saber lo que te queda bien y llevarlo con naturalidad.
Actitudes y gestos que las conquistan (más que las palabras)
Aquí el listado es largo, pero hay cosas que se repiten una y otra vez:
- Que sepa escuchar sin interrumpir.
- Que tenga sentido del humor, sin necesidad de ser un payaso.
- Que no tenga miedo a mostrar interés.
- Que cuide los detalles sin parecer forzado.
Un gesto tan simple como prestar atención en una conversación o recordar algo que dijiste días antes, pesa más, mucho más, que un físico de portada.
Cuando les preguntamos qué cualidades consideran imprescindibles en una relación, la respuesta fue casi unánime: la comunicación. Un 58% de las mujeres destacó la capacidad de hablar con honestidad, expresar emociones y saber escuchar como la base de una conexión real. Le siguen la empatía, con un 25%, y la sinceridad, con un 17%. También apareció la necesidad de cierta estabilidad emocional, aunque con menor frecuencia.
«Puedes ser divertido, atractivo o brillante, pero si no sabes comunicarte, eso acaba por romperlo todo». Saber hablar es sexy, pero saber escuchar, aún más.
Las cosas que más les hacen perder el interés
Tan claro como lo que les atrae, es lo que las aleja. La mala educación y los comentarios discriminatorios fueron mencionados varias veces como señales de alarma. También el machismo, la chulería, el paternalismo o cualquier actitud condescendiente generan rechazo inmediato.
Otros aspectos que hacen perder el interés son el desaliño, la falta de interés real, las mentiras y los hombres que solo hablan de sí mismos. “Cuando solo hay ego y cero empatía, me desconecto enseguida”. También se repitieron con fuerza el rechazo hacia la arrogancia, el fanatismo sin fundamento, o una ideología totalmente opuesta que impida construir un camino en común.
Y un apunte importante: los comentarios negativos sobre otras mujeres son una de las cosas que más les espanta. “Si habla mal de su ex o de otras chicas, sé que tarde o temprano hablará mal de mí”.
¿Cuidarse es un plus?
Aquí no hubo debate: les encanta. El 100% de las mujeres encuestadas respondió de forma positiva cuando les preguntamos por el uso de productos como perfumes, cremas o rutinas de cuidado personal. Algunas respuestas fueron directas —»me encanta», «fantástico», «está muy bien»—, mientras que otras dejaban un mensaje más claro: “ya era hora de que se cuiden igual que nosotras”.
Para ellas, que un hombre cuide su piel o elija con intención su perfume no solo es atractivo, es señal de que se respeta a sí mismo. “Es una forma de autocuidado y también de mostrar interés por cómo se presenta al mundo”. Cuidarse no es vanidad, es actitud. Y eso, para muchas, suma puntos desde el primer minuto.
¿Cómo ser más atractivo sin dejar de ser tú?
La última pregunta fue clara: ¿qué consejo le darías a un hombre que quiere resultar más atractivo sin perder su esencia? Las respuestas fueron unánimes en una cosa: todo empieza por ser uno mismo, pero con intención.
Algunas sugirieron pequeños gestos como cuidar el peinado, estar limpio y perfumado más allá de la ropa. Otras fueron más directas: “Que no mire el móvil mientras le hablas”, “Que escuche sin juzgar”, “Que se ría de sí mismo”.
También apareció el consejo más profundo; trabajar la autoestima, reforzar lo que le gusta de sí mismo y no actuar “para gustar”, sino para sentirse cómodo con quien es. “Se puede cuidar, ser presumido y tener un punto más femenino sin dejar de ser un hombre seguro”.
El mensaje final está claro, la autenticidad bien cuidada es la fórmula infalible. Gustarse uno mismo primero es, al final, lo que más gusta a los demás.
