Qué es la rosacea, por qué aparece en la piel y cómo combatirla

como-eliminar-la-rosacea-de-la-piel-de-la-cara

Aunque es benigna, a veces no es fácil vivir con esta afección a diario. Psicológicamente, este enrojecimiento de la cara no es fácil de aceptar y puede causar vergüenza y timidez, sobre todo cuando se produce un brote. Afecta principalmente a las mujeres de más de 40 años y puede tratarse de diferentes maneras, en función de las necesidades de cada persona, del tipo de rosácea y de sus deseos. La ciencia aún no ha encontrado una cura.

Cremas, complementos alimenticios, sérums, buenos reflejos, láseres… Vamos a hacer un balance de todas estas técnicas que se han creado para ayudarte a devolver a tu rostro su tez original y aceptar mejor estos desagradables episodios.

Este artículo te proporcionará toda la información que necesitas para controlar la rosácea y mantener en alto la autoestima.

¿Qué es la rosácea?

Es una enfermedad cutánea crónica que provoca enrojecimiento e inflamación en la cara sobre todo en la nariz, las mejillas, la frente y la barbilla. Está causada por la dilatación de los vasos sanguíneos de la zona. También puede causar hinchazón, hormigueo, protuberancias, granos y engrosamiento de la piel con descamación. La rosácea suele empezar en la edad adulta y afecta a personas de piel clara. En ocasiones la rosácea también puede ser hereditaria.

En algunos casos raros, puede afectar a los ojos, lo que se conoce como rosácea ocular (los síntomas frecuentes son ojos secos, ojos llorosos, ojos inyectados en sangre con sensación de ardor), o manifestarse como pápulas o pústulas en el caso de la rosácea pápulo-pustulosa.

También existe una forma muy rara de rosácea conocida como rosácea hipertrófica, que afecta más a menudo a los hombres, y que añade un engrosamiento de la piel al enrojecimiento, sobre todo alrededor de la nariz.

Esta enfermedad crónica que da lugar a un trastorno vascular aún no tiene cura, pero puede tratarse bien gracias a una serie de remedios cada vez más eficaces.

¿Quiénes son las personas más afectadas?

La rosácea afecta a personas de todas las edades, y cualquiera puede desarrollarla. Pero es más frecuente en adultos mayores de 30-40 años. Es más frecuente en las mujeres que en los hombres, pero éstos son más propensos a desarrollar síntomas graves. Se calcula que alrededor del 3% de la población está afectada por esta enfermedad cutánea.

Causas internas de la rosácea

Aunque la rosácea todavía esconde muchos misterios, algunos factores parecen ser comunes en las personas afectadas. En primer lugar, existe un trasfondo genético, con una tendencia más frecuente a la rosácea en personas de pelo claro, ojos claros y piel clara. También se ha observado que hay antecedentes familiares más propicios a la rosácea.

También se ha señalado la responsabilidad del demodex, un ácaro presente en la cara, que podría provocar rosácea cuando está presente en cantidades excesivas. Otra teoría sugiere que la afección está causada por un crecimiento excesivo de un tipo de bacteria llamada “helicobacter pylori” en el estómago. Otra teoría sugiere que la rosácea es un trastorno autoinmune. Esto significa que el sistema inmunitario del cuerpo ataca por error al tejido sano.

No existe una causa definitiva de la rosácea, pero hay varias teorías sobre lo que puede contribuir a esta enfermedad.

El cantante Dani Martín mostraba en las redes las consecuencias de esta afección que él mismo sufre en la piel.

Causas externas de la rosácea

Hay varios factores externos que pueden desencadenar o empeorar los síntomas de la rosácea. Entre ellos se encuentran:

– Exposición a la luz solar u otras fuentes de luz ultravioleta

– El estrés

– Consumo excesivo de alcohol

– Cambios bruscos de temperatura

– Comida picante

– Cafeína

– Ciertos cosméticos y productos para el cuidado de la piel

– Ducha demasiado caliente

– Fiebre

¿Con qué se suele confundir la rosácea?

Identificar la rosácea no suele ser un problema para el médico, incluso sin la ayuda de una biopsia. Hay algunas afecciones cutáneas que suelen confundirse con la rosácea, como el eczema, la psoriasis y las alergias. Sin embargo, hay dos tipos de afecciones cutáneas que pueden resultar especialmente confusas, ya que se asemejan en algunos aspectos a la rosácea:

– El acné, que puede provocar el enrojecimiento de la piel, pero va acompañado de los característicos puntos negros y granos. Por otra parte, la rosácea suele aparecer después de los 40 años, mientras que el acné afecta a personas más jóvenes, principalmente a adolescentes.

– La dermatitis seborreica de la cara, que puede llegar al puente de la nariz, como la rosácea. Un hongo causa esta afección, que da lugar a manchas rojas con escamas. Esta dermatitis puede causar enrojecimiento, picor y descamación del cuero cabelludo. También puede afectar a la piel del rostro. Causa enrojecimiento y protuberancias en la cara, lo que puede confundirse con la rosácea. Es más frecuente en personas con piel grasa o que tienen caspa.

Otras enfermedades de la piel, como el eczema o la psoriasis, pueden ser confusas, pero la localización en el cuerpo y el intenso picor asociado a ellas pueden descartar fácilmente la rosácea.

  • Síntomas de la rosácea

Los síntomas de la rosácea pueden variar en función del subtipo. Los más comunes son

Eritema: Se caracteriza por el enrojecimiento, el rubor y los vasos sanguíneos visibles.

Rosácea papulopustulosa: Se caracteriza por el enrojecimiento, la hinchazón y los granos.

Rosácea timatosa: Se caracteriza por el engrosamiento de la piel y el agrandamiento de la nariz.

Rosácea ocular: Los síntomas más frecuentes son sequedad y picor de ojos, lagrimeo, ojos inyectados en sangre con sensación de ardor.

Dani Martín publicaba en su perfil de Twitter cómo iba evolucionando favorablemente su piel como consecuencia de tratar correctamente la rosacea.

¿Cómo se trata la rosácea?

No existe una cura para la rosácea, pero hay tratamientos que pueden ayudar a controlar los síntomas. Los tratamientos más comunes son los medicamentos tópicos, como cremas, geles o lociones. Pueden ayudar a reducir el enrojecimiento, la hinchazón y la inflamación.

Los medicamentos orales, como los antibióticos, también pueden ser eficaces para tratar la rosácea. Éstos actúan reduciendo la inflamación. Aun así, estos son los tratamientos más populares y eficaces que utilizan las personas con rosácea.

Electrocoagulación

Es un tratamiento que utiliza corrientes eléctricas para destruir los vasos sanguíneos que causan el enrojecimiento. Se trata de un procedimiento mínimamente invasivo que puede realizarse en la consulta del médico.

Aun así, esta solución puede ser un poco agresiva y dolorosa, y suele dejar algunas marcas los días siguientes, pero que desaparecen con el tiempo.

Terapia de luz LED para la rosácea

La fototerapia es otra opción de tratamiento que puede realizarse en la consulta del médico. Este tratamiento utiliza luz pulsada intensa para reducir el enrojecimiento y la inflamación.

Una de las luces más populares en la terapia de luz LED para la rosácea es la terapia de luz azul y roja. Estos colores ayudan a reducir la inflamación y a eliminar las bacterias. Esta solución es indolora y no tiene efectos secundarios.

Tratamiento con láser

El tratamiento con láser es otra opción que puede realizarse en la consulta del médico. Este tratamiento utiliza el láser para destruir los vasos sanguíneos (incluso los más pequeños) que causan el enrojecimiento.

Esta solución también es indolora y no tiene efectos secundarios. Existen diferentes tipos de láseres que se han desarrollado contra la rosácea:

El láser KTP: el más común y el más antiguo, difunde un haz de color verde sobre las zonas afectadas para reducir la aparición de vasos dilatados.

El láser de colorante pulsado: ofrece dos modalidades diferentes: la termo-coagulante, para eliminar los signos visibles de la rosácea leve en 3 sesiones; y la foto-termólisis para la rosácea severa, con un tratamiento más agresivo en sólo 2 sesiones.

El láser ND Yag: también actúa por termo-coagulación, y ataca la rosácea más profundamente en la piel. Representa una buena opción para la rosácea severa.

Cremas tópicas

Existen varias cremas que pueden ayudar con la piel sensible y los síntomas causados por la rosácea. Algunas se venden sin receta, pero lo mejor es pedir consejo a tu dermatólogo o dermatóloga.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: