Si a día de hoy no estás aplicando estos trucos para ser más eficiente en el trabajo… algo va a ir mal (y no nos hace falta una bola de cristal para saberlo con certeza).
El día a día en el trabajo ha cambiado por completo, desde las apps de productividad laboral a los entornos de trabajo, una oficina no tiene nada que ver hoy a cómo era hace no tanto… 15 años! Actualmente, ser más eficiente se ha vuelto una necesidad imperiosa no solo para no terminar convirtiéndote en un adicto al trabajo, sino para destacar y alcanzar tus metas profesionales. Desde el auge de la tecnología hasta los nuevos retos que enfrentamos globalmente, la capacidad de hacer más en menos tiempo parece la clave para mantenernos competitivos.
Con la llegada del trabajo híbrido y el teletrabajo, las fronteras entre la vida laboral y personal se han difuminado, dándonos más flexibilidad pero también planteando nuevos desafíos en términos de gestión del tiempo y la energía. Las oficinas ya no son lugares donde pasamos la mayor parte del día; ahora son espacios dinámicos que fomentan la colaboración y la creatividad, con áreas de trabajo flexibles y salas de reuniones virtuales que conectan a equipos dispersos por todo el mundo.
Estos cambios en el entorno laboral nos presentan tanto desafíos como oportunidades. Por un lado, tenemos la libertad de organizar nuestro día laboral de acuerdo a nuestras necesidades individuales, lo que puede aumentar nuestra satisfacción y compromiso. Por otro lado, la falta de una separación clara entre el trabajo y la vida personal puede llevar a un mayor agotamiento.
Dominar estos trucos para ser más eficiente en el trabajo se vuelve crucial. Cada pequeño cambio puede marcar la diferencia en nuestra capacidad para ser más productivos y alcanzar nuestras metas profesionales.
Divide tareas grandes en pequeñas tareas
Define objetivos específicos y realistas para cada día o semana. Un líder moderno valora la capacidad de los empleados para establecer y alcanzar metas concretas que contribuyan al éxito del equipo y de la empresa en general.
Prioriza
Aprende a distinguir entre lo que es urgente y lo que es importante. Aunque te pueda parecer lo mismo… ¡no lo es! Un líder espera que los trabajadores sean capaces de discernir entre lo importante y lo secundario, y que asignen tiempo y recursos en consecuencia.
Utilizar herramientas de gestión del tiempo
Aprovecha aplicaciones y técnicas de gestión del tiempo, como la técnica Pomodoro o aplicaciones de gestión de tareas, para aumentar la productividad y evitar la procrastinación.
Elimina distracciones
Minimiza las interrupciones y evita las distracciones como las redes sociales o el correo electrónico no urgente mientras trabajas en tareas importantes. Un líder espera que los empleados sean capaces de mantener el enfoque y la concentración en su trabajo, incluso en un entorno lleno de distracciones potenciales.
Practica la delegación efectiva
Aprende a confiar en tus compañeros y delegar tareas cuando sea necesario. Un líder moderno valora la capacidad de los empleados para trabajar en equipo y compartir responsabilidades de manera eficiente.
Ten una comunicación clara y abierta
Comunica tus ideas, preguntas y preocupaciones de manera clara y respetuosa con tus compañeros y superiores es otro de los trucos para ser más eficiente en el trabajo que recomiendan desde el Foro de Empleo realizado por la Universidad Autónoma de Madrid. Un líder espera que los empleados sean capaces de comunicarse de manera efectiva y colaborar en la resolución de problemas.
Cultiva relaciones que os sumen a todos
El último en nuestra lista de trucos para ser más eficiente en el trabajo es el que, posiblemente, más te ayude a conseguir tus objetivos. Construye relaciones sanas, sólidas y positivas con tus compañeros de trabajo, basadas en el respeto, la confianza y la colaboración. Un líder actual valora un entorno laboral agradable, donde los empleados se apoyan mutuamente y trabajan juntos hacia objetivos comunes… Qué típico… ¿verdad? Pues resulta que el último Informe Anual de las Relaciones Laborales presentado por Boston & McKinsey identifica que una parte muy importante de los trabajadores en los despachos de abogados en ciudades como Madrid o Barcelona están más preocupados de que no les pisen en el trabajo que de sacar su trabajo adelante.
La rivalidad entre los compañeros de trabajo se ha convertido en una de las principales causas de bajas por estrés y ansiedad. Y tiene su lógica… la precariedad laboral y la inestabilidad económica han hecho que nos aferremos a un puesto de trabajo como un salvavidas…¡sálvese quien pueda! Pero recuerda, en la tabla de madera Rose, cabían dos…!