Por Mateo Carrasco
Puede que no estés contento con la vida que tienes, que no te guste tu trabajo, que se te haya acabado el amor en tu relación de pareja, que quieras cambiar de ciudad o, mejor aún, volver a tu lugar de origen. No te preocupes. Date un paseo por el centro de Madrid o Barcelona y descubre cómo puedes tener una vida extraordinaria.
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Hace algunos años me contaron una historia. Trataba sobre un coche, un adulto y un niño. Aunque la historia era bastante más larga, lo que me llamó la atención fue sólo un trozo. Mientras el adulto estaba esperando en la calle al lado de un cochazo, un niño se le acercó atraído por la belleza del coche que se encontraba a su lado, y no pudo evitar preguntarle si el cochazo era suyo. El adulto, sorprendido, sonrió, le guiñó un ojo al pequeño y le dijo que el coche, en realidad, se lo había regalado su hermano, a lo que el niño, suspirando, respondió: “ojalá algún día yo sea un hermano como el suyo”. GUAU. Y es que hay historias que no sabes si son verdad o no, y lo que es mejor: no importa, porque el mensaje que nos trasmiten es mucho más importante que la veracidad de los hechos.
Algo similar me ha ocurrido este fin de semana cuando me encontraba paseando por el centro de Madrid, concretamente por la zona de Nuevos Ministerios. Como si de un camino se tratara, había dibujado en el suelo un colorido paseo donde cualquiera podía leer los resultados de una investigación llevada a cabo por la casa Jaguar Land Rover.
El camino dibujado invitaba a los transeúntes a reflexionar y darse cuenta de que nunca es tarde para hacer lo que de verdad nos hace felices. Varios estudios han mostrado cuáles son los motivos de la frustración actual de la sociedad en la que vivimos y los resultados nos revelan que hay muchas personas que no aman el trabajo que hacen, al igual que muchas otras desearían tener una realidad diferente a la de antes de la pandemia.
Puesto que solo tenemos una vida y debemos de vivirla al máximo y ser lo más felices posible, Jaguar ha puesto en marcha una campaña muy cercana a la gente en el centro de la ciudad.
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Además de dar a conocer los resultados de la investigación en los que se basa la campaña, Jaguar ha creado un teatro de improvisación en el que después de preguntar a las personas que paseaban por la calle sus inquietudes, unos actores interpretaban cómo sería esa vida que todos queremos vivir y que nos está esperando: ¿Y si en vez de estudiar nuestra carrera hubiéramos elegido otra? ¿Y si nos hubiéramos quedado en la ciudad donde vivimos hace años? ¿Y si siguiéramos con nuestra primera pareja? ¿Y si en vez de elegir ser al que le regalan el coche elegimos ser el que regala el coche? ¿Y si únicamente delegamos la responsabilidad de nuestra felicidad en nosotros mismos? ¿Y si pudiéramos volver a empezar?
Podemos hacer como el niño de la historia del comienzo, y elegir ser los protagonistas de verdad y hacernos responsables de nuestra propia vida. Podemos hacer como él, que en vez de soñar ser cómo el adulto al que le regalan el coche, decide ser el que regala el coche.
Esto me recuerda al celebrado discurso de investidura de John Fitzgerald Kennedy : “No te preguntes lo que tu país puede hacer por ti. Mejor pregúntate qué puedes hacer tú por tu país”.
Siguiendo esta línea, Óscar Oñate, Director de Marketing de Jaguar Land Rover ha comentado que “la nueva campaña de Jaguar quiere animar a que la gente viva vidas extraordinarias, a que se guíe por su corazón, y persiga sus sueños… porque al final hemos descubierto que las elecciones más <<convencionales>> acaban generando arrepentimiento”.
Y es que, sin darnos cuenta, muchas veces nos convertimos en espectadores pasivos de nuestra propia vida, alejándonos de las metas que nos habíamos propuesto alcanzar, y por eso Jaguar te invita a reflexionar sobre la base de que si tú no vives tu vida, alguien la vivirá por ti. Elige quién quieres ser, y si decides que quieres ser el niño que regala un coche, regala un coche extraordinario. Regala un Jaguar y la felicidad estará asegurada de por vida.
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