Los polos de punto han venido para quedarse. Su estilo desenfadado y cómodo lo convierten en una prenda versátil perfecta para cualquier ocasión, desde quedadas casuales durante el tiempo libre hasta reuniones de negocios informales cuando se combina con una buena blazer. Si quieres sacarle el máximo partido a los polos de punto, no te pierdas las claves para ir fetén este verano.
Los polos de punto son prendas que trascienden en el tiempo, convirtiéndose en un básico de estilo. Para descubrir cómo adaptar este clásico reinventado a distintos eventos, aquí te dejamos la guía de estilo del polo de punto, con los consejos de Laura Luceño, investigadora en Moda y profesora del CSDMM-UPM, y César Andrés, periodista y relaciones públicas.
Polo algodón punto calado, 67% algodón y 33% poliéster (reciclado) de MANGO
Origen del polo
Desde su aparición el mundo de la moda los polos han destacado por su popularidad. Fueron creados en la década de 1920 por el tenista René Lacoste. Desde entonces han ido evolucionando más allá de la pista de tenis, convirtiéndose en un indispensable durante los meses más cálidos del año.
Laura Luceño, investigadora en Moda y profesora del Máster Oficial en Tecnología e Innovación en Diseño de Moda por la Universidad Politécnica de Madrid, nos cuenta que “en su origen se trataba de una prenda deportiva utilizada por los jugadores de polo de la India, cuna del algodón. Su cuello fue perfeccionado a finales del siglo XIX por los ingleses afincados en este país. Empezaron a jugar a este deporte y lo importaron a Gran Bretaña sobre 1860. John E. Brooks, nieto del fundador de la marca americana Brooks Brother lo comercializó en Estados Unidos a partir de 1896 pero fue René Lacoste, en 1926, el primero en utilizarlo para jugar al tenis”.
Para Luceño “el polo de punto al que nos referimos no es el de piqué de algodón que lanzó Lacoste, sobre todo asociado al deporte como por ejemplo el golf, sino que está confeccionado con algodón jersey, más formal que el anterior”.
Estilo y comodidad
No cabe duda de que diseñadores de renombre y distintas marcas han ido confeccionando nuevos estampados y tejidos para aportar un toque único y creativo. Los polos de punto se han convertido en el equilibrio perfecto, en una fusión de tradición y contemporaneidad. César Andrés apunta, por su parte, que “hay que reconocer que los polos de punto son muy elegantes, sobre todo porque nos retrotraen a esa estética aristocrático burguesa del siglo XX”.
Alejado de la incomodidad y la estrechez, el tejido de punto ofrece varias ventajas. Elasticidad, holgura, comodidad y capacidad de adaptarse al cuerpo son algunas de ellas. “El punto es el tejido más confortable por su elasticidad y adaptabilidad al movimiento. En cuanto a estilo, es menos formal que la camisa, aunque el cuello polo le confiere cierta elegancia”, señala Luceño a Rísbel magazine.
Polo tejido en hilatura con mezcla (55% poliéster y 45% algodón) con cuello de solapa y cierre de botonadura frontal, de ZARA
Polos de punto como opción ideal
¿Cuántas veces has tenido que ir a una cena, a una quedada con amigos o una reunión informal y no has estado seguro de qué ponerte? Quieres ir arreglado, pero no demasiado peripuesto. Formal, sin dar aspecto de excesiva seriedad e informal con aires despreocupados, pero acorde con la ocasión. Los polos de punto combinan la formalidad de una camisa y la comodidad de una camiseta. Para nuestra experta en Moda “teniendo en cuenta que el protocolo se ha flexibilizado en la sociedad actual, el polo de punto puede ser usado en eventos más formales que el polo de piqué. Ofrece una gran versatilidad y puede utilizarse con americana, así como en ocasiones más informales”.
Esta opción de moda también es la protagonista del verano. Las altas temperaturas nos obligan a escoger alternativas más ligeras, y para César Andrés “no cabe duda de que son prendas elegantes y cómodas, aunque con el desarrollo tecnológico textil parece más sensato decantarse por una de las opciones que atraen menos o directamente repelen el calor. Son perfectos para ocasiones formales, siempre que no haya una etiqueta. Nunca abrochados hasta arriba y nunca con corbata”.
El periodista consultado por Rísbel continúa señalando que “el polo combina con todo, con lino, vaquero, lana” y entre sus tiendas favoritas se encuentran Ralph Lauren, Hackett o Hugo Boss.
Polo de punto con cuello Jhonny, confeccionado en un tejido de punto texturizado grueso (Cuerpo:69% Algodón, 31% Poliéster) de HOLLISTER
Diseños, colores y estampados
Diseños clásicos, a rayas, estampados gráficos, florales o colores vibrantes y llamativos son algunas de las elecciones y patrones visuales que dependen del gusto y estilo de cada individuo. Para Laura Luceño “los colores nunca son neutros, encierran una carga simbólica considerable. El polo de punto más formal se comercializa en colores más clásicos: azul marino, blanco o beige, gris… colores asociados al convencional armario masculino”.
Estos colores neutros son la elección más versátil. El blanco aporta frescura, elegancia y se combina muy bien con cualquier otro color. El negro es perfecto para ocasiones más formales y aportar sofisticación. El gris es un color discreto de aspecto más casual, y el azul marino, además de elegante y versátil, combina muy bien con una extensa gama de colores. Se trata de una elección segura, sofisticada y atemporal que se adapta a diferentes estilos y estaciones. “Los polos monocolor siempre están de moda, un año nos pueden colar el café con leche y el otro el tostado, pero en general toda la gama de los claros son perfectos para cualquier primavera, verano y otoño”, nos cuenta César Andrés.
Experimenta, combina y encuentra la opción con la que más cómodo te sientas, busca el color, diseño y estampado que más se ajuste a tu personalidad y mejor refleje su estilo. “En general, te diría que la libertad actual al combinar te permite jugar con los registros más convencionales, la persona que viste más clásica recurrirá a la tónica general de los colores asociados a las estaciones, claros para primavera verano y más oscuros para otoño invierno. Al ser una prenda de fondo de armario, no suele permite una gran innovación en su uso” nos cuenta Luceño.
Polo de tejido de cuadrillé (100% algodón, al menos 50% algodón orgánico) de MASSIMO DUTTI
¿Tendencia duradera o pasajera?
Las tendencias son previsiones de consumo, los colores que más van a destacar, los modelos, las telas, las texturas o los estampados que más populares se harán entre el público. Para César Andrés “las tendencias viven de los estampados, por lo que depende de las pasarelas”.
El consumo de moda está íntimamente ligado a emociones y deseos. Esto implica que algunas tendencias sean efímeras, de periodos de tiempo más bien cortos y cambien rápidamente, mientras que otras puedan tener una presencia más duradera. “Creo que se trata de una tendencia duradera, es una prenda de fondo de armario y ya se puso de moda en los años 90. Viene y va y creo que en plena tendencia “comfy” actual, es una prenda estrella por su gran versatilidad, suavidad, elegancia y comodidad”, afirma Laura Luceño.
Los polos tienen una amplia variedad de colores, estampados y cortes. Esto permite a los hombres expresar su estilo personal y adaptarse a sus preferencias individuales. Son un imprescindible en el fondo de armario y seguirán siendo un referente de sofisticación, elegancia y comodidad que impedirá que te canses de ellos.
Polo de punto, fabricado con algodón sostenible, con rayas en el interior del cuello y de las mangas, de HACKETT
Artículo publicado por Marta Rubio
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR:
