Eurovisión 2024: este es el orden de las todas las actuaciones de la gran final

orden-actuaciones-final-de-Eurovision-2024

Así será el orden de las actuaciones de la final de Eurovisión 2024 y todo lo que tienes que saber sobre los representantes de cada país y sus canciones.

Treinta y siete países han participado en las etapas preliminares del Festival de Eurovisión 2024 pero, tras la descalificación del representante de Países Bajos, solo veinticinco de ellos han alcanzado la gran final con sus actuaciones sobre el escenario. Esta noche, en Malmö, se celebra el espectacular evento final, donde el ganador lo obtiene todo.

Mientras tanto, los concursantes ajustan sus trajes más llamativos y los productores afinan sus instrumentos, nosotros hemos preparado una guía con puntos clave para que sepas qué esperar esta noche (por si no has estado al tanto en los últimos tres meses). Este es el orden de las actuaciones de la final de Eurovisión 2024 y todo lo que tienes que saber sobre sus canciones.

1. Suecia: Marcus & Martinus – “Unforgettable”

En una actuación que parece extraída de una escena de «Matrix», la enigmática mujer descrita como «Inolvidable» y que «cobra vida por la noche» es el centro de una trama cautivadora y visualmente deslumbrante. Tóxica y venenosa, su presencia mantiene a dos gemelos noruegos en un estado de seducción constante, bailando en un paisaje urbano que recuerda a Tokio por la noche. La escenografía, que combina elementos de neón y futuristas, refuerza esta atmósfera de una ciudad que nunca duerme, mientras los gemelos luchan por resistirse a su encanto letal, tejiendo una historia de atracción y peligro en la metrópolis iluminada.

2. Ucrania: Jerry Heil & alyona alyona – «Teresa & Maria»

Dos de las cantantes más conocidas de Ucrania nos recuerdan que todos los santos nacieron como seres humanos y que depende de nosotros elegir nuestro camino. Sus representantes, vestidas con armadura y armada con una espada extraída de un moño, representan la resistencia y la valentía de las mujeres ucranianas a lo largo de la historia. Las sombras en el escenario simbolizan a los compatriotas caídos, recordándonos la pérdida y el espíritu de lucha del pueblo ucraniano. Su acto culmina con imágenes de mujeres ucranianas influyentes, celebrando su impacto y legado.

3. Alemania: Isaak – «Always on the Run»

Una actuación cargada de emoción en la que el fuego no solo es un elemento visual, sino también un símbolo de los conflictos internos que enfrenta. Cantando sobre la lucha constante contra los demonios que lo persiguen, Isaak representa a través de la escenografía—un fuego que consume su casa—la intensidad y el peligro de ignorar esos problemas internos.

A lo largo de la canción, Isaak describe cómo su intento de huir de sus problemas solo alimenta más las llamas, haciendo imposible apagar el incendio. Sin embargo, al final de la actuación, llega a una poderosa realización: enfrentar directamente sus demonios es la única manera de encontrar la paz. Al declarar con resolución «Fuera de mi cabeza, estoy harto, no puedo más», el fuego en el escenario se apaga, simbolizando su triunfo sobre el caos interno.

4. Luxemburgo: Tali – «Fighter»

El ascenso de Tali desde luchar para sobrevivir en Nueva York hasta representar una figura de poder en Malmö es dramáticamente capturado en su actuación inspirada en «Wakanda Forever». En el escenario, Tali se transforma en una guerrera, liberando su «bestia interior» en un espectáculo visual donde jaguares digitales la acompañan tanto en las pantallas LED como en realidad aumentada, simbolizando su lucha contra enemigos y demonios internos.

La letra de su canción refleja claramente su propia experiencia y crecimiento personal, con frases impactantes como «Tienes más de 20 años, no tienes más tiempo para actuar como una niña ni para divertirte».

5. Israel: Eden Golan con «Hurricane»

La situación de Eden con su canción «October Rain» y su transformación en «Hurricane» es un claro ejemplo de cómo la política y la música se entrelazan a menudo en eventos como Eurovisión, que tradicionalmente busca evitar la controversia política en sus presentaciones. La descalificación inicial de «October Rain» por su posible interpretación política subraya la delicada línea que los artistas a menudo deben navegar en contextos internacionales.

«Hurricane», la canción con la que finalmente compiten, se centra en un mensaje de perseverancia y reconstrucción tras la destrucción de un huracán. Este tema universal puede ser interpretado de muchas maneras, lo cual es útil para eludir restricciones políticas mientras se permite a Eden explorar temas de adversidad y recuperación.

La elección de realizar la actuación dentro de un anillo o círculo gigante añade una capa de simbolismo que puede ser interpretado como el ciclo interminable de la vida y la muerte, o como un comentario sobre los ciclos perpetuos de conflicto en el mundo. La teoría de que representa los túneles donde se retienen a los rehenes es otra interpretación que añade profundidad a la actuación, aunque también podría acercarse a las líneas que Eurovisión intenta evitar.

Los abucheos recibidos durante los ensayos generales y la final del jurado indican que, a pesar de los esfuerzos por neutralizar el contenido político de la canción, la audiencia puede haber percibido o interpretado mensajes subyacentes en la actuación. La respuesta de los productores de disimular estos abucheos con aplausos grabados en la transmisión televisiva es un intento de mantener la atmósfera positiva del evento, aunque esto también puede ser visto como una manipulación de la percepción pública sobre la recepción de la canción.

Lituania: Silvester Belt – «Luktelk»

La canción de Silvester Belt, «Esperando», destaca en el concurso por su tono oscuro y enérgico, con un aire que él mismo describe como «nocturno». Este tema musical captura la esencia de estar en un limbo, una zona intermedia entre simplemente estar vivo y vivir plenamente. La dicotomía que presenta entre la obligación y el deseo se refleja claramente en la letra: «No quiero bailar, pero tengo que bailar».

Este conflicto interno se transforma en un mensaje de resistencia y perseverancia a través del baile, un acto metafórico de moverse a través de las dificultades hasta que eventualmente se disipen. «Espera, baila a través de ello y al final se desvanecerá», dice Silvester, sugiriendo que la acción de bailar —incluso cuando no se desea— puede ser una forma de enfrentar y superar los momentos de estancamiento o desesperación.

España: Nebulossa – «Zorra»

Meri, la vocalista de Nebulossa y representante española de Eurovisión 2024, toma un término profundamente cargado de controversia y lo reinterpreta de manera poderosa y subversiva en su canción. En español, el término «zorra» generalmente tiene una connotación negativa, refiriéndose peyorativamente a una mujer, mientras que su contraparte masculina, «zorro», se usa para describir a alguien astuto, resaltando un claro ejemplo de sexismo en el lenguaje.

Meri, con su experiencia y perspectiva de mujer madura, no solo cuestiona este uso sino que se apropia del término y lo transforma en un símbolo de resistencia y honor. A través de su música, Meri expresa abiertamente su aceptación de ser vista como la «oveja negra», la incomprendida, la «fría como una piedra», y proclama su determinación de permanecer fiel a sí misma con las palabras: «Pero así es mi naturaleza, no puedo molestarme en cambiar por ti». Esta letra no solo refleja una reafirmación de su identidad y autonomía sino también una crítica al juicio social y las expectativas impuestas a las mujeres.

Estonia: 5MIINUUST x PUULUUP – «(nendest) narkootikumidest ei tea me (küll) midagi»

El grupo estonio 5Miinust & Puuluup se presenta en Eurovisión con una propuesta singular y llamativa, cuyo título, «(nendest) narkootikumidest ei tea me (küll) midagi», se traduce como «No sabemos (de verdad) nada sobre (estas) drogas». Este título no solo es notable por su longitud, siendo el más largo en la historia de Eurovisión, sino también por el aire de controversia que lo rodea.

Según algunas teorías y comentarios de fans en Estonia, la banda ha estado involucrada en un incidente con la policía por posesión de sustancias ilegales, aunque ellos niegan cualquier implicación. Este contexto añade una capa de significado a la canción, que parece ser un juego teatral y satírico sobre negar la culpabilidad.

Irlanda: Bambie Thug – «Doomsday Blue»

La actuación de Bambie Thug en «Doomsday Blue» es una audaz declaración de identidad y empoderamiento. Describiéndose como una «bruja no binaria», Bambie utiliza su tiempo en el escenario para crear una experiencia visceral que recuerda a una película de terror, completa con gritos de muerte, conjuros alrededor de un pentagrama iluminado por velas, y la presencia de un brujo semidesnudo que añade un aire de misterio y posible maldición.

Esta puesta en escena intensa y oscura no solo captura la atención, sino que también contrasta fuertemente con actos anteriores como los de Lordi, quienes, a pesar de su propia estética de horror, parecen más suaves en comparación.

Letonia: Dons – «Hollow»

El cantante más popular de Letonia aborda temas relacionados con el confinamiento emocional y la libertad personal. Antes del espectáculo, nos comentó que «Hollow» puede referirse a esa sensación de estar entumecido y de estar atado por lazos. «En nuestras vidas hay momentos en los que te sientes rehén de tus propias inseguridades, demonios, sentimientos internos, relaciones y perspectivas», dice. «Existen tantas verdades y tantas opiniones sobre cómo debes vivir tu vida en lugar de seguir tu propio camino».

En su actuación de «Hollow», el representante de Letonia utiliza un anillo gigante en el escenario que actúa como un símbolo potente, un portal que marca la transición entre estar atrapado por las propias inseguridades y liberarse hacia una mayor autenticidad personal. Esta puesta en escena no solo es visualmente impactante, sino que también refuerza el mensaje de la canción sobre el atrapamiento y la liberación.

El cantante explica que «Hollow» aborda la sensación de estar entumecido y la pérdida de autonomía personal, una experiencia que muchos encuentran resonante. «En nuestras vidas hay momentos en los que te sientes rehén de tus propias inseguridades, demonios, sentimientos internos, relaciones y puntos de vista», menciona.

Grecia: Marina Satti – «Zari»

La puesta en escena de «Zari» («Dados» en griego), interpretada por Marina, ofrece un enfoque fresco y dinámico que combina el encanto de las actuaciones de los MTV European Music Awards (EMA) con la riqueza cultural de Grecia. Utilizando una sola cámara para capturar la actuación, Marina y sus bailarines, a quienes ella cariñosamente llama «mis amigos», recorren el escenario entregándose completamente al ritmo de la música griega. Un momento destacado de la coreografía es cuando hacen una pausa para sacar pañuelos blancos de sus botas, un gesto que añade un toque teatral y folclórico a la actuación.

La canción incluye un delicioso break de baile griego, que no solo demuestra la habilidad técnica de los bailarines, sino que también sirve para celebrar y reivindicar la cultura griega contemporánea. Marina ha expresado su deseo de dejar atrás los estereotipos que a menudo se asocian con Grecia —como el feta, la Acrópolis y el tzatziki— y en su lugar, mostrar una visión más auténtica y juvenil de su cultura.

Reino Unido Olly Alexander – «Dizzy»

La puesta en escena de «Dizzy» por Olly, sin duda, lleva la representación y la expresión artística a un nivel provocador y altamente visual. Ambientada en un espacio que simula las duchas y vestuarios de un gimnasio, Olly junto a cuatro bailarines vestidos en diminutos calzoncillos rojos, exploran una coreografía que, en momentos, puede ser interpretada como altamente sugestiva. Las escenas a veces muestran a los bailarines aparentemente boca abajo o adoptando poses que imitan actitudes sexuales, lo que puede ser percibido de manera muy diferente dependiendo del espectador.

Esta actuación desafía las normas convencionales de la televisión familiar y podría ser vista como un trabajo de arte audaz o, para otros, rozar el límite del contenido apropiado para un espectáculo generalista, inclinándose hacia lo que algunos podrían considerar como porno softcore. La intención detrás de esta puesta en escena es claramente provocar y desafiar las percepciones del público, jugando con los límites de lo que se considera aceptable en el entretenimiento masivo.

Noruega: Gåte – «Ulveham»

La banda de folk-metal más popular de Noruega ha encontrado una manera fascinante de combinar viejas leyendas nórdicas con música poderosa y contemporánea. Su canción «Ulveham» relata la inquietante historia de una madrastra malvada que convierte a su protegida en loba, y la única forma de revertir la maldición es que la niña beba la sangre de su hermano. Esta narrativa se despliega en el escenario con una intensidad dramática palpable, especialmente cuando el cantante principal «vomita» la sangre desde una plataforma giratoria, un momento que asegura captar la atención del público.

El escenario se intensifica aún más con los LED que muestran olas rompiendo, creando un ambiente dramático y casi cinematográfico que complementa perfectamente la temática de la canción. Gunnhild, la vocalista principal, describe interpretar esta canción como «dar a luz», lo que subraya la intensidad emocional y física de su actuación. Sin embargo, los lamentos que se oyen durante la canción no son de dolor, sino que pertenecen al kvede, un estilo tradicional de canto inspirado en el pastoreo de cabras, que ella magistralmente incorpora para añadir una capa adicional de autenticidad y profundidad cultural a la interpretación.

La combinación de estos elementos no solo hace de «Ulveham» una de las actuaciones más memorables y dramáticas del año, sino que también destaca cómo la banda puede trasladar historias antiguas a una audiencia moderna de manera efectiva y emocionante.

Italia: Angelina Mango – «La noia»

Angelina Mango presenta en Eurovisión una enérgica y apasionante interpretación de su canción «La noia», que se traduce literalmente como «Aburrimiento». A través de los vibrantes ritmos de la cumbia, Angelina busca liberarse de las expectativas sociales y profesionales que la constriñen. Esta canción es un himno a la libertad y la hermandad, desafiando las convenciones y rechazando el papel tradicional impuesto a las mujeres. Con letras contundentes como «Princesa, te llaman princesa, así que deja ya de fregar los platos», Angelina cuestiona directamente las normas de género y las responsabilidades domésticas que a menudo se imponen a las mujeres.

Además, la canción aborda las presiones y restricciones del mundo del entretenimiento, reflejadas en su crítica a la industria musical: «Negocios, hablan de negocios, mientras tanto, cierro los ojos mientras firmo contratos».

Serbia: Teya Dora – «Ramonda»

Teya Dora ofrece una actuación en Eurovisión que va más allá de la simple música; es un profundo homenaje a la resiliencia y la esperanza. Su canción sobre la «Ramonda», una flor rara que tiene la notable capacidad de revivir con solo unas gotas de agua, se convierte en un poderoso símbolo de resistencia y renacimiento. En Serbia, que sufrió la pérdida de un tercio de su población durante la Primera Guerra Mundial, esta flor representa la capacidad del país de reconstruirse y florecer nuevamente tras los devastadores conflictos.

Antes del espectáculo, Teya Dora compartió sus pensamientos, diciendo: «Para mí, la Ramonda representa la esperanza y demuestra que, incluso en los días más oscuros, cuando parece que no queda nada, si tienes esperanza y confías en ti mismo, puedes encontrar una salida».

Finlandia: Windows95man – «No rules»

Windows95man, el DJ rebelde conocido por su estilo desenfadado y su lema de que «no hay reglas», se presenta en Eurovisión con una actuación que es un verdadero espectáculo de excentricidad y autenticidad. Afirma que la vida se vive mejor siguiendo tus propias reglas, y su performance no hace más que subrayar esta filosofía. La entrada en escena es tan dramática como original: emerge de un gigantesco huevo vaquero, simbolizando un renacimiento a su manera única. A lo largo de la actuación, Windows95man corre por el escenario vestido únicamente en ropa interior que parece fundirse con su piel, creando un efecto de desnudez ilusoria.

Portugal: Iolanda – «Grito»

La actuación de Iolanda en el escenario es una poderosa representación de «autodefensa y confianza en uno mismo», como ella misma lo describe. En su interpretación, enfrenta sus demonios y emociones internas, simbolizados por bailarines enmascarados vestidos de blanco. Estos personajes oscuros representan las luchas internas que todos enfrentamos, desde el miedo y la inseguridad hasta el dolor y la duda. El momento culminante de la actuación ocurre cuando Iolanda alcanza su mayor grito —un momento tan intenso que lo sentirás vibrar—, y es entonces cuando las bailarinas se desvanecen.

Armenia: LADANIVA – «Jako»

La canción de Jako es un poderoso mensaje dirigido a sí misma y a todos los jóvenes que se encuentren en una situación similar en cualquier parte del mundo. A través de su música, Jako anima a ser fieles a un «yo real, salvaje y sin complejos», y a encontrar su verdadera vocación, tal como ella encontró la suya en el arte. La letra revela las contradicciones que enfrentó en su juventud, donde le decían que no hablara demasiado, pero tampoco que guardara silencio, cómo vestir y cómo comportarse. Sin embargo, esos días de conformidad han quedado atrás. Ahora evolucionada y empoderada, advierte: «Soy una chica libre, así que bailaré y tú mirarás». Estas palabras llenas de determinación dan paso a un estribillo optimista y enérgico que, aunque breve en letras, rebosa de energía: «Vamos, vamos, vamos, por favor. Levántate, baila».

Chipre: Silia Kapsis – «Liar»

Aunque el título de la canción de Silia podría hacer pensar que se trata de una pieza dedicada a una persona, en realidad aborda un tema más complejo y profundo: la opresión ejercida por las redes sociales sobre los estándares de cómo deberíamos vivir y ser, afectando tanto la imagen corporal como la identidad sexual. En su actuación, Silia se acompaña de cuatro bailarines masculinos que, en los últimos segundos del espectáculo, se quitan la camiseta en un gesto simbólico de libertad y de revelación del yo auténtico.

Suiza: Nemo – “The Code”

El artista no binario Nemo sube al escenario de Eurovisión con una performance que fusiona géneros tan dispares como el rap, el drum ‘n bass y la ópera, desplegando una actuación tanto divertida como poco convencional. Pero más allá de su originalidad, su actuación lleva un mensaje profundo sobre la autoaceptación y refleja la perseverancia necesaria para vivir de manera abierta y libre, especialmente resonando con la comunidad LGBTQ+.

Para Nemo, el título de la canción es un enigma que refleja su propio viaje de autodescubrimiento al aprender que no se identifica ni como hombre ni como mujer. En sus propias palabras: «I, I went to hell and back/ to find myself on track/ I broke the code/ Oh, Oh, Oh…». Utilizando el código binario como metáfora del dualismo masculino y femenino, de blanco y negro, Nemo revela su verdad: «En algún lugar entre el 0 y el 1/ ahí es donde encontré mi reino venido/ mi corazón late como un tambor».

Eslovenia: Raiven – «Veronika»

La canción de Raiven se inspira en Veronika Deseniška (o Veronika de Desenice), una figura emblemática de la historia y el folclore eslovenos. Veronika fue la primera mujer eslovena juzgada erróneamente por brujería y ha perdurado como símbolo de la persecución histórica hacia las mujeres. Raiven describe su pieza como «la sinfonía de las sirenas», y no solo se centra en la supuesta brujería de Veronika, sino también en las historias de varias figuras femeninas legendarias de la historia.

Croacia: Baby Lasagna – «Rim Tim Tagi Dim»

«El título ‘Rim Tim Tagi Dim’ no tiene traducción al croata. En realidad no significa nada», explica Baby Lasagna, el representante de Croacia de Eurovisión 2024. «La primera muestra que se oye en la canción dice ‘rim tim tagi dim, rim tim tagi dim’. Me dije: ‘Sería divertido añadir voces reales diciendo rim tim tagi dim'». No hay una gran historia detrás. Es simplemente un chico en su habitación, y el riff sonaba como ‘rim tim tagi dim'».

El verdadero significado de la canción no reside en el título, sino en los versos que reflejan un dilema nacional. La Unión Europea ha descrito a Croacia como un país de emigración, con más personas saliendo del país que las que llegan desde el extranjero. Marko canta sobre un joven que abandona su pueblo natal en busca de una vida mejor, una decisión que está lejos de ser fácil.

Georgia: Nutsa – “Firefighter”

Nutsa sube al escenario de Eurovisión con un mensaje claro: detener la negatividad que consume al mundo. «He sufrido muchos comentarios críticos y mucho odio desde que era niña, y siempre he contrarrestado esta negatividad con amor», explica. Su canción es un llamado a apagar el fuego de la negatividad, usando el fuego como metáfora de los conflictos y odios actuales. «Intento salvar este amor y estoy apagando el fuego con amor», afirma. En un punto culminante de su actuación, Nutsa ejecuta un icónico movimiento de baile, donde se coloca a cuatro patas mientras el escenario simula arder, un gesto teatral que no deja a nadie indiferente.

Francia: Slimane – «Mon Amour»

«Mi actuación será como una cita romántica», así describe Slimane, el representante francés, su puesta en escena para «Mon Amour». Vestimenta blanca, luces blancas del público, y humo blanco que ondea alrededor de Slimane, crean la sensación de estar en el cielo. El momento cumbre de la actuación, y sin duda muy «eurovisivo», ocurre cuando Slimane, filmado de perfil, se aleja del micrófono y canta a capela. Cada vez que lo hace, el público se vuelve frenético.

Austria: Kaleen – «We Will Rave»

Kaleen, cuádruple campeona mundial de baile, revitaliza el eurodance de los 90 con su canción sobre encontrar consuelo en la discoteca. Como ella misma explicó: «‘We Will Rave’ es sobre la necesidad de un refugio cuando tienes el corazón roto y de encontrarlo en la música. La rave es el lugar donde los marginados y las almas heridas van a curarse, disolviendo sus problemas a través de la música. Es el mar de ritmos que lava el dolor y nos ofrece salvación.» Y lo hace todo bajo un deslumbrante diamante gigante adornado con cristales de Swarovski.