Aunando lo mejor de las escapadas rurales y urbanas, es el punto de partida ideal para descubrir algunas de las ciudades más bellas del norte de Italia, como Venecia, Bolonia o Verona
Ubicado en la provincia italiana de Rovigo, entre Bolonia y Venecia, el hotel y restaurante gourmet Il Bonello es una parada obligatoria este verano para los amantes de las escapadas más exclusivas, rurales y de la buena gastronomía.
Nacido hace 30 años, el establecimiento, que dispone de seis habitaciones decoradas en perfecto equilibrio entre el pasado y el presente, se encuentra en el pequeño pueblo de Gaiba, a orillas del río Po. La bicicleta se convierte durante la estancia aquí en el medio de transporte por excelencia para explorar las villas, iglesias y monasterios visibles desde los sinuosos caminos inmersos en el campo.
Al volver, un chapuzón en la piscina será la mejor opción para refrescarse disfrutando de la apacible naturaleza circundante.
Concebido inicialmente como restaurante, Il Bonello ha evolucionado hacia una forma completa de hostelería en la que el hilo conductor es la unión entre la historia de las tradiciones de la zona y de su gente. Con el objetivo de despertar los cinco sentidos, su cocina abarca un amplio abanico de especialidades, desde carnes a la brasa hasta los carpaccios de base vegetal.
Mención especial merecen también sus desayunos, fuera de lo común, con pastelería de la casa y charcutería gourmet, entre otras delicatessen.
Una escapada a Il Bonello es sinónimo de desconexión en la apacible campiña italiana a precios muy razonables. En su clara apuesta por la sostenibilidad, destaca su huerto ecológico, donde se cultivan muchas de las verduras, frutas y hierbas aromáticas que usan en su cocina, especialmente distintas variedades de tomates, berenjenas y calabacín.
Para aquellos que quieran combinar las virtudes del mundo rural con los avances de la era urbana, el hotel es el punto de partida ideal para descubrir algunas de las ciudades más espectaculares del norte de Italia, como Venecia, Bolonia, Verona o incluso Florencia. A raíz de su popularidad, Il Bonello ha sido incluido en una guía escrita por el empresario Arrigo Cipriani «Non siamo quelli delle stelle».
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