Asesinatos en abundancia, grandes interpretaciones y una trama trepidante sobre un agente del FBI mediocre que se pasa el día esperando a que suene el teléfono de su mesa. Aquí tienes todo lo que puedes esperar de la nueva serie policíaca de Netflix
Comienza el primer capítulo de la serie. Una madre y su hija caminan hacia un tren en una estación de metro de Washington, DC. El Agente Nocturno es el nuevo thriller político de Netflix, basado en la obra del mismo nombre de Matthew Quirk publicada en 2012, sobre un agente nocturno (un poco mediocre en un primer momento) que, de repente, se ve envuelto en algunas emociones políticas.
La serie continua con una escena en el bullicioso metro de la ciudad. Aquí, uno de los pasajeros, el agente del FBI Peter Sutherland (Gabriel Basso), se da cuenta de que un hombre deja una mochila dentro del vagón y se baja disimuladamente del tren. Peter Sutherland acciona la parada de emergencia rápidamente y ordena a todo el mundo que baje; casi todos consiguen salir antes de que estalle la bomba. Mientras le curan de sus heridas, localiza al hombre que ha dejado la bomba, lo persigue hasta un callejón, pero lo pierde cuando un coche se empotra contra él.
Mientras tanto, Rose Larkin (Luciane Buchanan) está a punto de dar una charla TED sobre ciberseguridad, justo cuando firma un acuerdo de financiación para su startup.
Un año después, le asignan tareas administrativas en el sótano de la Casa Blanca, en el mostrador de Acción Nocturna; durante el turno de noche, analiza informes y atiende llamadas desde un teléfono especial. Aquí es donde los agentes en apuros llaman para pedir refuerzos para los agentes que están de servicio, aunque el teléfono casi nunca suena.
El protagonista parece haber estado luchando contra la percepción pública de que fue responsable del atentado del metro, así como contra las especulaciones de que su padre, un agente estrella que murió en un sospechoso accidente de coche, era un traidor. Peter Sutherland también parece estar en un tira y afloja de lealtad entre la jefa de personal de la Casa Blanca, Diane Farr (Hong Chau), y su jefe del FBI, el subdirector Jamie Hawkins (Robert Patrick).
Lo cierto es que ese teléfono del que tiene que estar pendiente nunca suena. Peter hace su trabajo administrativo concienzudamente, pero sabe que en el fondo de su corazón le gustaría algo de emoción, quizá incluso de naturaleza política.
De repente, al otro lado de la ciudad, una pareja de novios (y agentes encubiertos) se encuentra en apuros. Justo antes de que tengan que luchar por sus vidas -pero justo después de que los oigamos cuchichear sobre un posible topo ruso en la Casa Blanca- envían a su sobrina Rose Larkin (Luciane Buchanan) a un teléfono calle abajo para llamar… sí, al teléfono que está al lado de nuestro protagonista… ¡por fin!
Mientras los agentes-amantes encubiertos son asesinados, la jefa de gabinete del presidente, Diane Farr, pone a Peter a cargo de mantener a Rose a salvo. «Si ha llamado a tu número, esto es más importante de lo que puedas imaginar», le dice. «Confío plenamente en ti».
El guión se va haciendo a medida que avanzamos en esta primera temporada de la serie El Agente Nocturno.
Dos persecuciones en coche, muchos tiroteos, algunas balas que se acaban, un piso franco, una caja fuerte de armas en una mesa de café, un villano con un anillo con el escudo de la Casa Real de Yugoslavia que Peter sospecha que puede ser una pista, villanos sin ningún anillo y una pareja de Bonnie y Clyde especialmente despiadada, posiblemente de origen ruso. Todo esto ocurre antes de que Rose le cuente a Peter que a los tíos Espía les preocupaba que hubiera un topo en la Casa Blanca. Ahora, no pueden confiar en nadie y tienen que actuar por su cuenta.
Es propulsivo, muy divertido, con cada curva perfectamente negociada. Las interpretaciones son excelentes, especialmente la de Basso, que saca dos o tres notas de lo que podría haber sido fácilmente un papel de una sola nota. El Agente Nocturno te da esa cálida sensación que tienes cuando te encuentras con algo un poco mejor de lo que tiene que ser. No se puede pedir más de la adaptación de un thriller político superventas sobre un agente nocturno.
Shawn Ryan es el showrunner de esta nueva entrega de Netflix, responsable más reciente de la serie S.W.A.T., pero que también estuvo detrás de una de las series policíacas más inteligentes e infravaloradas de las últimas décadas.
Ryan, que se dio a conocer como guionista de televisión con The Shield, adapta ahora para Netflix la novela de Matthew Quirk The Night Agent. The Shield fue una creación extraordinaria: brillantes arcos narrativos largos y cortos que examinaban la corrupción del sistema y del alma, excelentes interpretaciones -no sólo de los pilares como Michael Chiklis, Jay Karnes y Walton Goggins, sino también de estrellas invitadas como Forest Whitaker, inolvidable- y personajes de una complejidad que rivalizaba con cualquiera de The Wire.
La mayor parte de la intriga en El Agente Nocturno podría estar con Ellen (Eve Harlow) y Dale (Phoenix Raei), a quien vemos ejecutando a alguien en Racine, WI al final del primer episodio. Puede ser que Dale también estuvo en la casa donde mataron a los tíos de Rose. ¿Para quién trabajan? ¿Y por qué parece que van a por gente al azar en Racine? Al menos hacen las cosas con cierto estilo, tomándose el tiempo de secuestrar a un bebé para fingir ser una pareja.
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