Entre la tradición y la reinvención: Versace regresa a los ’90 con la frescura contemporánea propia de estos tiempos
Desde el bullicio de Los Ángeles y los focos de Cannes hasta la intimidad de Milán, la ciudad que ha sido cuna y epicentro de la moda italiana. Donatella Versace regresa, no sólo a su tierra natal, sino también a una época: la colección otoño de 1995 creada por su hermano Gianni. «Me pareció fresca y contemporánea», compartió Donatella en un íntimo preestreno en la recién inaugurada sede de la marca en Milán.
La nostalgia de los años 90 resurge con fuerza, y Versace encabeza esta tendencia. A pesar de que una generación más joven percibe esa década como historia, Donatella encuentra inspiración en 1995, año que destacó por alejarse de la típica estética seductora de Versace, como el famoso vestido jungla de J.Lo.
En homenaje a esa era, Claudia Schiffer, ícono de aquellos años, regresó a la pasarela, deslumbrando en un vestido damier verde lima. Aunque el retorno de rostros familiares evoca el pasado, la colección presentada destila modernidad. Los pantalones han sido reemplazados por shorts, las chaquetas lucen proporciones relajadas y los guantes blancos, símbolo noventero, desaparecen para dar lugar a una nueva concepción de la «elegancia».
La colección combina pijamas de sarga de seda, conjuntos relucientes y vaqueros con perlas y cristales, mostrando un lujo casual y desenfadado. Una pieza destacada fue una chaqueta masculina, tributo a un diseño que Donatella creó para Prince.
El desfile de Versace para la temporada primavera-verano 2024 es una oda a la reinvención, una fusión entre el origen y el presente, entre el legado y la visión. Y Donatella, con su maestría innata, nos demostró que siempre hay formas nuevas de contar viejas historias.
Desfile Versace hombre primavera 2024
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