El grupo Airelles aterriza en Venecia con un hotel histórico frente a San Marcos, una apertura que marcará un antes y un después en la isla de Giudecca.
Hablar de Airelles es hablar de hoteles de lujo, de palacios donde la historia sigue viva, habitaciones que parecen pensadas para alojar a reyes o príncipes y un servicio tan exquisito que sabe anticiparse a cualquier necesidad… de película, ¿verdad?. Después de años cultivando esta forma de entender la hospitalidad en Francia, Airelles abre su primer hotel en Italia. Se llama Airelles Palladio Venezia y recibirá a sus primeros huéspedes el 1 de abril de 2026.

La ubicación no puede ser más simbólica. La isla de Giudecca mira de frente a la Plaza de San Marcos, pero mantiene una tranquilidad difícil de encontrar en la laguna. Allí estuvo durante siglos un complejo dedicado a la formación de jóvenes venecianas, luego una villa frecuentada por artistas y escritores, y finalmente un conjunto que durante años reclamaba una restauración a la altura de su historia. Airelles ha asumido el reto con criterio y con el deseo de devolver luz a un lugar que lo merecía.
El renacer de un conjunto histórico frente al Gran Canal
El antiguo complejo Bauer Palladio encuentra aquí una segunda vida. La restauración respeta la essenza veneziana y permite que los huéspedes duerman en un edificio que durante siglos formó parte de la educación de las jóvenes de la ciudad. El proyecto incluye una villa independiente y otra residencia de tres dormitorios escondida entre árboles y pasillos de piedra, con un jardín privado y piscina como secreto bien guardado.

El arquitecto Christophe Tollemer ha dirigido el diseño interior con cristal de Murano, telas Rubelli, lámparas Fortuny y suelos de terrazo. Todo se ordena en tonos caoba, azules profundos y ámbar cálido, creando estancias que invitan a bajar el ritmo.

Airelles Palladio Venezia contará con 45 habitaciones y suites. Algunas miran al Gran Canal y otras se abren a los jardines, un privilegio poco común en la ciudad. El edificio principal albergará dos restaurantes, aún sin nombres desvelados. Desde el grupo insisten en que la gastronomía será uno de los puntos fuertes. Habrá un bar de cicchetti, otro con terraza para ver caer el día con un spritz en mano y una carta que mezclará técnica francesa con producto italiano.
Un hotel pensado para quedarse
Y es que, si es una ciudad que Venecia invita a pasear, este hotel invita a volver (¡o a no salir!). El spa cuenta con tres piscinas, gimnasio, zona de bienestar al aire libre y tratamientos para quienes viajan con poco tiempo y muchas ganas de parar. También habrá club infantil, un detalle que hace imaginar familias cruzando en góndola para regresar al hotel sin prisas. La iglesia Santa Maria della Presentazione, diseñada por Andrea Palladio y restaurada para la ocasión, podrá acoger bodas pequeñas y celebraciones privadas. Decir “sí, quiero” junto a siglos de historia será un gesto difícil de olvidar.

La dirección cree en una relación real con la ciudad. El hotel colaborará en proyectos de conservación del Palacio Ducal y los Jardines del Redentor. No solo abre un hotel; aporta cuidado y recursos a un patrimonio que pertenece a todos. Cuando Venecia recibe visitantes con esta mirada, el viaje se vuelve más justo.
Airelles Palladio Venezia abre una puerta nueva para quienes buscan Venecia sin agobios, con tiempo para ver la bruma sobre el canal y escuchar el silencio en Giudecca. Será un lugar para llegar, dejar la maleta y sentir que uno forma parte de algo que empezó hace siglos. Queda poco para comprobarlo. Abril de 2026 ya está en el calendario. La expectación crece entre viajeros y amantes del arte veneciano. Un estreno que promete.

