Prestar atención en los pequeños detalles para excitar a tu pareja y enfocarte en lo que estás sintiendo en ese momento, te harán potenciar cada estímulo de una forma más intensa
El tan de moda mindfulness ha trasladado su arte a la práctica sexual, pero con su propio nombre y apellido: el Slow Sex. Y es que, el teletrabajo, las restricciones sociales y las limitaciones de aforo han hecho que nuestra actividad sexual se haya visto seriamente perjudicada. Por un lado, los solteros que utilizaban las noches de los fines de semana para ligotear, ahora se las ven de app en app escudriñando perfiles, y las parejas estables han visto como las responsabilidades del día a día y estar trabajando bajo el mismo techo en el que conviven, han hecho que dediquen menos tiempo del que les gustaría a disfrutar del sexo, o dicho mal y pronto, «están más aburridos de verse».
Las relaciones pausadas y conscientes arrojan una lista de ventajas que han empujado a los españoles a esforzarse en mantener relaciones dejando a un lado la porno ilusión del macho empotrador y el tan famoso «aquí-te-pillo-aquí-te-mato». Entre los beneficios del slow sex, los más destacados son los siguientes:
– Te conocerás mejor, sabiendo qué te gusta y cómo te gusta.
– Sentirás más, al estar centrado en lo que está pasando en ese momento y disfrutando de esas sensaciones.
– Pondrás en juego tu creatividad para obtener placer en zonas que creías olvidadas o a las que no habías prestado atención hasta ahora, más allá de los genitales.
– Conectarás con tu pareja y contigo mismo, reconectando también con tu sexualidad.
– Redescubrirás tanto tu cuerpo y tus sensaciones como el cuerpo y las sensaciones de tu pareja.
– Reforzarás el vínculo y la comunicación en pareja, mejorando así la conexión de la relación en general.
¿CÓMO SE PRACTICA EL SLOW SEX?
EXPLORA SU CUERPO, Y EL TUYO
Puede que estemos acostumbrados a ver su cuerpo a diario (si se trata de nuestra pareja) pero el cuerpo humano esconde infinidad de zonas erógenas inexploradas o poco transitadas. Por esa razón, dedica un tiempo a redescubrir vuestros cuerpos: las orejas, los pies, el pelo, las muñecas y el cuello… ¡paséate tranquilamente por todas esas zonas a las que no sueles prestar atención!
LA IMPORTANCIA DEL LUGAR
La experiencia se verá multiplicada si preparas un ambiente adecuado a la situación. La luz, la música, velas aromáticas y zonas cómodas harán que el sexo se convierta en una auténtica delicia.
CALMA, LAS PRISAS NO SON BUENAS
Como su propio nombre indica, una de las normas del slow sex es practicarlo con calma, sin mirar el reloj, disfrutando de lo que estás haciendo en cada momento.
JUEGA CON LOS SENTIDOS
¿Sabías que vendarle los ojos a tu pareja durante el sexo potencia que estimule el resto de los sentidos? Ponle una venda en los ojos, juega con el tacto y deja que el placer invada cada zona de su cuerpo.
EL ARTE DEL MASAJE
Un buen masaje será el mejor camino para conducir a tu pareja a un estado de relax y trance perfecto para disfrutar del sexo. ¡No te centres solo en la espalda, en los pies está en truco!
SEXO ORAL: SIEMPRE SÍ
Llegado el momento y cuando notes que tu pareja está cerca de clímax, el sexo oral le hará llegar al orgasmo más placentero de su vida. Deja este momento para cuando ya lleves un tiempo considerado preparando “el terreno de juego”. Es bueno hacerle esperar.
¡JUGUETES!
Los juguetes siempre suman, pero tienes que saber utilizarlos. Para él o para ella, para adelante o para atrás, debes tener un buen kit de juguetes sexuales que amenicen la práctica y con los que conseguirás mejores resultados.
PENETRACIÓN
Este paso debe de ser el último. ¿La razón? Muy sencilla: es el paso más esperado. Debe desearlo, y para ello nada mejor que haber practicado con esmero todos los pasos anteriores. ¡No tengas prisa por penetrar! Es mejor hacerle esperar…
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR:
