La nueva película del actor rescata trajes de raya diplomática, polos de punto, chaquetas cruzadas y chándales retro que marcarán estilo en 2026.
Los amantes de la moda tienen una cita con el cine en enero. Marty Supreme, la nueva película protagonizada por Timothée Chalamet, aterriza en España con un guiño directo al glamour estadounidense de mediados del siglo XX. La historia sigue, con toques ficcionados, la ascensión de Marty Reisman, leyenda del tenis de mesa en Estados Unidos y tres veces campeón. Más allá del deporte, la película ya ha llamado la atención de los más fashionistas por su vestuario: un despliegue de trajes diplomáticos de doble botonadura, pantalones de pinza con caída amplia, chalecos, polos de punto y chándales vintage que parecen recién sacados del Lower East Side de los años 50. Miyako Belichi, directora de vestuario, rescata piezas reales compradas a coleccionistas.
La estética retro que define Marty Supreme
El vestuario de la película gira en torno a una inspiración clara: la elegancia despreocupada de los años 50 y 60.

Un cortometraje del cineasta experimental Ken Jacobs, que documenta la vida de los inmigrantes (sobre todo judíos) en el Lower East Side de Manhattan de 1955, sirvió como inspiración a Josh Safdie, el director de cine que firma la película, así como a la diseñadora de vestuario Miyako Bellizzi para construir el bullicioso mundo del centro de la ciudad en «Marty Supreme».
Los trajes de raya diplomática, chaquetas cruzadas y pantalones de pata ancha marcan el tono de una estética que vuelve con fuerza en 2026. Chalamet encarna a Reisman con looks que equilibran formalidad y carácter despreocupado que ya promete marcar tendencia este 2026.
Miyako Belichi y el regreso de los básicos eternos
Belichi construye un armario que podría estar en cualquier mercadillo vintage de Nueva York. Chalecos de punto, polos con estructura, camisas de manga corta ancha y cuellos grandes, y hasta chándales retro forman parte del imaginario de la película.

El equipo reunió prendas originales de coleccionistas y no todas fueron fáciles de conseguir. La producción incluye también relojes vintage que aparecen casi como amuletos estéticos dentro de la narrativa.
Y es que, tal y como hemos podido ver en las primeras imágenes que se han filtrado sobre la película, los sórdidos barrios del Lower East Side, y la moda que se vestía en sus calles, son tan protagonistas de la película como el propio jugador de ping pong que lleva su nombre.
Timothée Chalamet como icono de estilo en pantalla
El actor se mueve entre escenas con un estilo despreocupado. Sus looks tienen ritmo, presencia y facilidad, como si ese vestuario formara parte natural de su personalidad.

La película no solo recupera siluetas clásicas, también invita a pensar cómo integrarlas en nuestro día a día: un polo de punto con pantalón ancho, un traje cruzado con caída ligera o un reloj vintage que cierre el conjunto.
La subcultura de los estafadores era especialmente atractiva para Bellizzi, quien se inspiró en los mafiosos mafiosos del siglo XX para evocar la arrogancia de Marty. Esta referencia inspiró sus trajes más cuadrados y extragrandes; conjuntos de dos piezas a medida con hombreras marcadas, en colores oscuros como el gris oscuro y el azul marino, que se convirtieron en su uniforme durante gran parte de la película.

Marty Supreme llega a finales de enero. Si te gustan los looks con nostalgia y carácter, apunta la fecha y disfruta de este viaje a la moda del pasado con sabor a 2026.

