El traje con zapatillas para la boda: ¿Si, no, cómo y cuando?

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Se acerca el gran día y te ha entrado la duda: ¿hago bien en ir en traje con zapatillas a una boda? Échale un vistazo a nuestros consejos de estilo y saca tus propias conclusiones

Hasta hace relativamente poco, con alguna honrosa excepción, era más bien improbable que alguien decidiera llevar zapatillas de deporte con un traje elegante. Y menos acudir ataviado de esa manera a un evento formal como una boda. Sin embargo, las cosas están cambiando, y si sabes elegir las prendas correctamente, podrás ser el no va más sin necesidad de renunciar a la comodidad de unas deportivas.

Aunque parezca mutuamente excluyente, la combinación de traje y zapatillas no solo es posible, sino que incluso puede resultar sumamente elegante, siendo denominada en ocasiones casual smart. En los últimos años, numerosos actores, músicos, deportistas y otros famosos han optado por lucir el traje con zapatillas en sus apariciones públicas, lo que ha inspirado a muchos hombres para vestirse así en una boda.

Leonardo DiCaprio, Sir Ian McKellen, Idris Elba, David Beckham y Orlando Bloom son solo una pequeña parte de las celebridades que recurrieron a las zapatillas para acudir a eventos de gala. Y son la perfecta muestra de que se puede optar por un calzado cómodo e informal sin perder la elegancia por ello.

No obstante, por muy ilusionado que estés por probar el traje con zapatillas para una boda, es necesario tener en consideración unos límites. No puedes utilizar cualquier color, y también deberás prestar atención al tipo de deportiva, además de ser muy cuidadoso con el aspecto que presenten en conjunción con tu traje. Una elección equivocada puede suponer la diferencia entre ir elegante y una mezcla desastrosa.

Sin embargo, aunque pueda resultar un poco complicado, el resultado vale la pena. Presta atención a estos consejos para poder fardar de tu look de traje con zapatillas para una boda y serás la envidia de todos tus amigos y conocidos.

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El tipo de traje y de zapatilla

Evidentemente, no todos los trajes quedan bien con zapatillas, y los que sí lo hacen no pueden ser combinados con cualquier tipo de deportiva. Para poner en práctica este estilo, será mejor que recurras a dos piezas más bien ceñidos y estilizados, evitando en la medida de los posible los diseños clásicos u holgados. No obstante, si te atreves con un traje más bien oversized, adelante, siempre que sepas compaginarlo con tus zapatos.

En cuanto a las zapatillas, si bien ofrecen más posibilidades que con los trajes, también requieren cierto cuidado. De entrada, debes descartar las deportivas que normalmente emplearías para irte a correr o jugar al fútbol, así como las denominadas ugly shoes. Elige un calzado cómodo y urbano, pero no excesivamente informal, y sobre todo sencillo, al margen del diseño o el color.

Asimismo, es recomendable emplear zapatos que no pasen del tobillo, ya que las deportivas tipo bota o con lengüetas grandes pueden ser problemáticas en combinación con el traje. Su principal inconveniente radica en la forma que puede adquirir el pantalón con ellas. Por ende, un traje ajustado con deportivas de caña baja siempre será la mejor combinación.

También puedes emplear el tipo de cierre que prefieras. Tanto el velcro como los cordones suelen quedar bien, por lo que no debes preocuparte demasiado por este detalle. Puedes probar distintas variantes y decantarte por la que combine mejor, o establecer un par de zapatos distinto para cada traje en el caso de que tengas más de uno.

Finalmente, procura que tu calzado cuente con una suela más o menos gruesa y, sobre todo, cuida la calidad del mismo. Es preferible invertir un poco más de dinero con el fin de asegurarse de que tus deportivas serán duraderas. Añade también otros complementos como cinturones de cuero o una elegante bolsa de bandolera, y desabróchate un par de botones de la camisa si quieres un aire algo más atrevido.

La mezcla de colores

En cuanto a la gama cromática que puedes emplear, también cuentas con bastantes opciones, aunque la primera siempre serán las zapatillas blancas. Se trata de un color que puede combinarse con casi cualquier otro tono, por lo que podrás usarlas tanto con trajes negros como claros o de colores más atrevidos.

No obstante, si no termina de gustarte el blanco, tampoco hay problema. Otras tonalidades ideales para tu calzado son el gris, el marrón, el negro y, en ocasiones, el azul oscuro, ya que por lo general entonan bien con cualquier traje. Lo importante es que se trate siempre de colores más bien apagados y neutros. Por ende, si eres de los que compran deportivas de tonos alegres o más vivaces, será mejor que las reserves para un atuendo más casual.

Asimismo, evita los zapatos con logotipos visibles o estampas. Cuanto más sencillo resulte a la vista, mucho mejor, al igual que con el diseño general del calzado. No obstante, si te atreves, puedes optar por alguna pequeña decoración o toque de color adicional, mientras no resulte especialmente estridente.

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Las mejores ocasiones

Finalmente, y tras decidir qué traje combinar con qué deportivas, llega otra cuestión fundamental: ¿cuáles son los momentos más propicios para poner en práctica tu nuevo estilo? Por tentador que sea recurrir al mismo incluso para eventos formales, conviene reservarlo únicamente para determinadas ocasiones.

Una buena forma de dictaminar qué contexto resulta idóneo es preguntarte si el traje es obligatorio o si el hecho de llevarlo se trata de una decisión personal. Si lo que buscas es una salida más bien informal, un evento relacionado con el ocio o una reunión con amigos o familiares, adelante. Se trata de casos en los que la vestimenta elegante es opcional, por lo que nadie te va a decir nada si llevas tus deportivas favoritas.

Para cualquier otra ocasión, es preferible que recurras al calzado clásico. Por ejemplo, en la oficina es mejor no llevarlo, aunque también depende del dress code de cada lugar: si tienen una política más bien laxa, es poco probable que te llamen la atención. Sin embargo, si en tu lugar de trabajo es necesario acudir vestido de etiqueta, no te arriesgues a acudir en deportivas y mejor busca unos zapatos formales lo más cómodos posible.

En cuanto al tema de las bodas, tiende a ser bastante peliagudo. Cabe la posibilidad de que, siendo un invitado más, no haya problema en optar por el estilo casual smart, pese a que siga siendo preferible utilizar zapatos. En el caso de que seas el padrino, la cosa se complica, ya que se trata de una de las figuras más importantes de la celebración junto con los contrayentes.

Evidentemente, si eres el novio, ni se te ocurra acudir al altar con zapatillas, por muy bien que queden. A menos que hayáis optado por un estilo general más laxo y rompedor, el traje con deportivas suele ir asociado a ámbitos en los que la elegancia no es obligatoria, por lo que el día de tu enlace no es la mejor ocasión de probarlo.

Y ahora que ya conoces todos los detalles, ¿te atreves a intentarlo?

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