Esta temporada, la superposición se reinventa con un gesto sencillo: combinar manga corta y larga en un mismo look. Una idea que transforma polos y camisetas en piezas clave del otoño.
Los desfiles de otoño-invierno 2025/26 nos han dejado una idea meridianamente clara: el polo, la camiseta o el jersey de manga corta (oversize a ser posible) ya no viajan solos. La capa inferior —siempre de manga larga— ahora te va a servir para jugar y aportar un poco de contraste a tus looks más invernales. Así lo hemos podido ver en Dolce & Gabbana, Magliano y Pronounce, cada uno con su lectura, y todos con un mensaje útil: la superposición afina la silueta y actualiza básicos que ya tienes en el armario.
En Dolce & Gabbana la fórmula toma un tono urbano elegante. Un polo negro de manga corta se coloca sobre una segunda piel gris, con cuello polo en gris claro asomando como marco. El conjunto pide cintura marcada con cinturón fino doble y pantalón ancho con pliegues en lana gris. El resultado equilibra hombro relajado arriba y caída amplia abajo. Si te mueves entre reuniones y afterwork, copia este orden: base ajustada de punto fino + capa corta ligeramente suelta + pantalón de pinzas con vuelta o largo limpio. Zapatillas discretas o mocasín blando, y listo.
Magliano baja la idea a tierra con una lectura casual. Un suéter de lana fucsia de manga corta hasta el codo se apoya sobre una camisa blanca de puño largo y cuello redondo visible. Pantalón recto en beige, de cintura amplia, cinturón marrón y bolsita en el cinto que (muy útil si no quieres llevar el móvil en el bolsillo). Este look funciona para la universidad, un estudio creativo o el fin de semana. Claves: deja ver el bajo de la camiseta/camisa inferior un par de centímetros, remanga con naturalidad y respeta un tiro medio que siente bien cuando caminas.
La propuesta de Pronounce afina el gesto con un polo estampado en grises sobre camisa blanca y pantalón muy alto y amplio en tono piedra. Importa la proporción: volumen controlado en el torso y amplitud generosa en la pierna. Si quieres replicarlo, busca un polo corto o mételo ligeramente por dentro para definir cintura. Botas o zapato blanco sellan ese aire gráfico que ves en pasarela.
Cómo llevar el Overlayer sin perderte:
Arranca con una base fina (térmica ligera, camiseta de algodón o punto merino) y súmale arriba un polo, un jersey corto o una camiseta con estructura.
Evita que ambas prendas tengan el mismo grosor; la capa externa debe “flotar” un poco. Si la prenda de arriba es ancha, elige un pantalón con pinza y caída; si arriba está más ceñido, puedes jugar con un pantalón vaquero recto.
Colores que funcionan desde el primer intento:
Aquí lo importante es jugar: negro + gris (D&G), fucsia + blanco + beige (Magliano) y gris gráfico + blanco (Pronounce). O apúntate nuestra propuesta: el polo gris de Hackett de la imagen de arriba con la camiseta verde de manga corta oversize de Zara que vas a ver a continuación:
También puedes probar otros colores como el marino + crudo, verde botella + gris hielo o chocolate + crema. El contraste ayuda a leer la superposición; si prefieres discreción, apuesta por un mismo tono en dos intensidades.
Detalles que marcan la diferencia.
Deja asomar el cuello de la capa inferior cuando uses polo o suéter de manga corta. Ajusta la longitud de las mangas: el largo debe sobresalir uno o dos dedos bajo el codo del exterior. Ordena la cintura con un cinturón fino o tiradores interiores, y añade un accesorio útil —bolsita, llavero, bandolera blanda— para rematar.
Tampoco te creas que el Overlayer no exige compras muy complejas…¡para nada! Revisa tus polos y camisetas de verano, súmales bases de manga larga de punto fino, y juega con alturas, cuellos y cinturones. Esa es la gracia: sumar capas con intención para que el look gane profundidad pero que al mismo tiempo sea cómodo.
