La Maison presenta Louis Vuitton Home Collections en Milan Design Week 2025 con una propuesta que da un nuevo significado al arte de vivir a través de cinco líneas de producto únicas y una apuesta por el diseño español.
Louis Vuitton conquista el mundo del interiorismo. Y lo hace transformando cada rincón de la vida cotidiana en una experiencia de belleza, funcionalidad y legado artesanal. Durante la Milan Design Week 2025, la firma francesa ha presentado por primera vez sus Louis Vuitton Home Collections, una ambiciosa expansión de su línea Objets Nomades, que ahora se completa con cinco categorías: la colección Signature de mobiliario e iluminación, objetos de decoración, menaje de mesa, juegos excepcionales y, por supuesto, los ya conocidos Objets Nomades.
Un universo completo en el que la marca ha volcado su savoir-faire, sus materiales más reconocibles y su red de talentos creativos, entre los que destacan diseñadores como Patricia Urquiola y Jaime Hayon. Esta apertura marca un nuevo capítulo en la historia de la Maison: un salto natural hacia el interiorismo, sin perder de vista sus raíces.
Un escenario con historia para presentar el futuro
El lugar elegido para la presentación no ha sido uno cualquiera. Louis Vuitton ha convertido el Palazzo Serbelloni en Milán en el escenario ideal para esta primera entrega de Home Collections. El contraste entre el legado neoclásico del palacio y la visión contemporánea del diseño de interiores de la firma ha creado una experiencia envolvente.
La propuesta se despliega por cada habitación, invitando a los visitantes a un recorrido sensorial donde los objetos no solo se exponen: se habitan. Muebles, textiles, vajillas y juegos se integran en escenas domésticas que no buscan imponer tendencias, sino despertar emociones. Esta puesta en escena no solo da vida a los productos, sino que muestra cómo Louis Vuitton entiende el hogar: como un espacio íntimo, vivo y lleno de carácter.
La colección Signature: una nueva lectura de la artesanía
Dentro de esta gran familia de productos, destaca la Signature Collection, firmada por Patrick Jouin y Cristián Mohaded. Es aquí donde Louis Vuitton traslada sus códigos clásicos —el cuero, la marquetería, las maderas nobles— al mobiliario y la iluminación.
Cada pieza ha sido pensada para acompañar la vida diaria sin renunciar al detalle, a la forma o al acabado. Es diseño que se puede usar, que se toca, que evoluciona con el tiempo. Las formas son cálidas, los volúmenes amables, y la funcionalidad está presente sin imponerse. La Maison recupera su esencia marroquinera para explorar nuevas texturas, colores y materiales que enriquecen la experiencia doméstica.
Un recorrido inmersivo entre habitaciones vivas
El itinerario comienza en la habitación Parini, donde los textiles toman protagonismo. Aquí, nombres como Charlotte Perriand, Zanellato/Bortotto o el propio Cristián Mohaded conviven en un diálogo matérico y cromático. Las creaciones textiles se entrelazan con el Malle Vin, reinterpretando el concepto de baúl como un objeto de deseo funcional y refinado.
En los boudoirs, destaca el gabinete Kaleidoscope de Estúdio Campana: una pieza que se sitúa entre el arte, el mobiliario y la escultura. Como si de un cofre se tratara, su estructura rinde homenaje a la tradición del viaje y a la vez se convierte en una joya visual. La mesa de juegos modular completa esta escena, demostrando que el diseño también puede ser lúdico sin perder elegancia.
Fortunato Depero y el hogar como galería
Otra de las habitaciones rinde homenaje al artista futurista Fortunato Depero. Aquí, los colores estallan, y los objetos se convierten en obras de arte. Las telas cuelgan de las paredes como cuadros, mientras que los platos se elevan sobre pedestales, rompiendo la barrera entre lo decorativo y lo utilitario.
Todo está dispuesto para mirar y para tocar. Para contemplar y para usar. Esta sala resume bien la propuesta de Louis Vuitton: crear belleza cotidiana con objetos que se integran, sorprenden y acompañan.
Patricia Urquiola y el alma orgánica de la colección
La diseñadora española Patricia Urquiola tiene un papel destacado en esta colección. Sus jarrones Diago y las cestas Pétalo aportan al conjunto una sensibilidad orgánica, casi poética. Las formas suaves, inspiradas en la naturaleza, dialogan con el resto del mobiliario sin desentonar.
En la sala Beauharnais, las butacas Pecora —también firmadas por Urquiola— comparten espacio con el sofá Lagoon de Patrick Jouin, las mesas de centro Vertigo y las esculturas florales de Inti. El resultado es un salón acogedor, lleno de matices, donde la estética no resta funcionalidad y el confort convive con la belleza.
El espíritu nómada, ahora en casa
Desde su nacimiento en 2012, los Objets Nomades han sido el laboratorio creativo de Louis Vuitton en el universo del diseño. Esta nueva entrega no los desplaza, sino que los enriquece. Las Home Collections no abandonan el espíritu viajero, pero ahora lo trasladan al interior del hogar.
La exploración del mobiliario, de los objetos de mesa, de los textiles o de los juegos de salón, responde a una misma pregunta: ¿cómo puede el lujo mejorar nuestra vida diaria sin imponer un estilo, sino acompañando nuestro propio ritmo?
Louis Vuitton propone respuestas distintas, pero todas tienen un punto en común: la excelencia artesanal. Y en este terreno, pocas firmas manejan con tanta naturalidad la combinación de herencia, innovación y detalle como la Maison.