Cómo pedirle un aumento de sueldo a tu jefe (y que no te mande a la mierda)

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¿No te atreves a pedir un aumento de sueldo? Tranquilo, aquí te van los mejores consejos para sugerirle a tu jefe un aumento de sueldo y salir airoso

Estás pensando en pedir un aumento de sueldo a tu jefe? ¿Qué es lo que te impide hacerlo? Pedir dinero a alguien (ya sea en forma de «aumento de salario» o «adelanto de nómina» o incluso «préstamo») nunca es una situación agradable.

Cuando pedimos un aumento de salario estamos poniendo de manifiesto que consideramos que el trabajo que estamos realizando para la empresa no se ve compensado en nuestra nómina y, por tanto, que estamos por debajo de nuestras posibilidades de desarrollo e infravalorados.

Son muchas las personas que quieren pedir un aumento de sueldo y no se atreven. De este modo, se acaban conformando durante años con un sueldo que no consideran equiparable al esfuerzo que realizan. ¡A nadie le gusta pedir dinero!

No obstante, pedir un aumento de sueldo no es tarea fácil. Por esta razón, tienes que pensar en un plan efectivo para conseguir que tu jefe entienda el mensaje de la mejor manera posible. Es normal que de primeras esta situación te imponga, pero es el único medio para lograr lo que quieres. 

Antes de lanzarte al vacío de solicitar un aumento de sueldo, debes tener en cuenta varias cosas importantes:

  • La situación financiera de la empresa: ¿estáis creciendo? ¿os estáis expandiendo como compañía? ¿los resultados están siendo positivos? o por el contrario ¿estáis en un momento de recesión económica?
  • La situación del país en el que se encuentra la compañía: este es el punto más importante. En España, por ejemplo, la columna vertebral de nuestra economía es la pequeña y la mediana empresa. Esto quiere decir que, por normal general, las empresas tienen muy bien ajustados los márgenes, para que la actividad se desarrolle sin que afecte de forma negativa a la compañía. Cada «imprevisto» puede suponer alterar el plan anual de la empresa y eso no le gusta a ningún jefe.  Y sí, que un empleado pida de repente un aumento de sueldo es un imprevisto.

Sin embargo, el NO ya lo tienes, así es que no pierdes nada en intentarlo. Eso sí, no puedes hacerle esta sugerencia a tu jefe de cualquier manera. Planifica qué, cómo, cuándo e incluso dónde le vas a hacer esta propuesta a tu superior. Aquí te van una serie de consejos que te serán de gran ayuda para conseguir tu objetivo:

ELIGE BIEN LOS MOTIVOS

No puedes pedirle un aumento de sueldo de la noche a la mañana. Debes de investigar y evaluar si es una decisión factible y correspondiente al puesto que ocupas.

Investiga si las personas de tu sector trabajan el mismo número de horas y cobran cifras similares. A partir de ahí, si consideras que tu esfuerzo está siendo infravalorado, es hora de que te pongas manos a la obra para diseñar una estrategia que convenza a tu jefe de que te lo mereces.

Si tienes problemas para conocer las características de trabajo de aquellos que se dedican a lo mismo que tú, tienes la posibilidad de acceder a páginas web especializadas como PayScale y Glassdoor.   

Por otra parte, más allá de la comparativa, es importante que pienses en aquello que te hace merecer este aumento. ¿Qué es lo que aportas en tu entorno laboral? ¿Con qué solvencia llevas a cabo tu trabajo?

Piensa en lo bueno que has aportado durante el tiempo que llevas trabajando allí y subraya tus cualidades positivas. Si tú mismo no te crees que eres merecedor de esa subida de sueldo, nadie se lo creerá.

ELIGE EL MOMENTO CORRECTO

Una cuestión verdaderamente importante es que selecciones con rigor el momento en el que vas a solicitarle el aumento de sueldo. Un ascenso o un éxito reciente son ejemplos de momentos idóneos para realizar esta petición. No minusvalores tus méritos y lucha porque te sean reconocidos.

Sin embargo, hay ocasiones en la que nuestros triunfos no son suficientes debido a problemas externos como la entrada de pocos ingresos. De esta manera, también tendremos que tener cuenta estos factores coyunturales para decidir en qué momento pedir el aumento.

Una vez consideres que el entorno laboral es apropiado, tanto por tu trabajo como por el de la empresa en conjunto, elige en qué situación hacerle esta sugerencia a tu jefe.

Ten por descontado que si le dices como quién no quiere la cosa que quieres un aumento de sueldo no recibirás el feedback que estabas buscando. Lo más adecuado es que conciertes una cita formal con él/ella, solo de esta manera prestará plena atención a tu propuesta.

Además, no anticipes la noticia. Coméntale a tu jefe que quieres tratar un tema con él, pero no le desveles tus intenciones. Si le haces saber que lo que buscas es un aumento de sueldo, probablemente le dé más vueltas al asunto que si se lo dices directamente.

USA LAS PALABRAS CORRECTAS

Tras una investigación previa, es importante que pienses en qué palabras son las más apropiadas para exteriorizar tu propósito. Pedir un aumento de sueldo puede convertirse en un momento muy incómodo, pero si haces un buen uso de la retórica, lo tendrás hecho.

Uno de los métodos que puedes emplear a la hora de solicitar el aumento es la técnica del sándwich. Esta consiste en introducir entre dos piezas de retroalimentación positiva, una no tan positiva.

Puedes comenzar la conversación destacando tu entrega y el trabajo que estás realizando. Después de esto, puedes introducir tu deseo de que tu sueldo se vea aumentando y cuando lo hayas dejado claro, recalcar aquellos aspectos que van bien en la empresa y que no se verían afectados por una mejora de tu economía.

Muéstrate dispuesto a ofrecer algo más a la empresa. Puedes considerar la posibilidad de trabajar un poco más o involucrarte en otros aspectos. Tú decides hasta qué punto podría serte rentable un aumento.

Por otro lado, aunque puedes optar por determinar una cifra, evita introducir en esta negociación la cantidad de dinero a la que querrías ascender. Deja que sea tu jefe el que decida. A caballo regalado no le mires el diente.

Asimismo, independientemente de la respuesta final, sé agradecido. Da las gracias a tu jefe del tiempo que te ha prestado y de la escucha que te ha brindado.

SÉ PACIENTE

No es una cuestión de vida o muerte. Sé paciente y déjale a tu jefe su tiempo y espacio para tomar una decisión.

Probablemente en esta primera conversación con tu jefe no tengas una respuesta clara. Sigue trabajando como llevas haciendo hasta ahora o aún mejor y tú jefe no tendrá dudas de que eres digno de un sueldo superior.

SI DICE QUE NO

No tengas miedo al rechazo. Un aumento de suelto no es algo fácil de conseguir. No te desanimes. Puede que dentro de un tiempo sí que sea posible.

Cabe la posibilidad de que tu jefe si quiera proporcionarte esa ayuda, pero que no sea un buen momento para hacerlo. Respeta su decisión y no te rindas.

No seas insistente y vuelve a intentarlo en un período de tiempo prudente. Continúa trabajando como has hecho hasta el momento y verás que al final obtienes tu recompensa. Tras haber valorado estos aspectos y elaborado un plan perfecto, es el momento de que te acerques a tu jefe y le hagas entender que tú sí que vales.

Artículo publicado por Ángela García-Tomé

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